Así lo anunció el vice primer ministro ruso, Yuri Borísov, durante el foro empresarial Rusia–América Latina, que se ha celebrado recientemente en La Habana.
“Esta mañana hemos asistido a la ceremonia de inauguración del ensamblaje de GAZ y Ural. Hemos instalado talleres de montaje en las fábricas cubanas que permiten fabricar autos en el territorio de Cuba, teniendo en cuenta las necesidades del mercado local. Espero que no solo sea para el consumo interno, sino también para los socios cubanos en los países del Caribe”, dijo Borísov citado por Interfax el pasado lunes.
El vice primer ministro ha destacado que se trata de un “paso muy serio”. Es más, según él, “es una inversión en la economía que no dará dividendos hoy o mañana, sino en las próximas décadas”. En este sentido, el proyecto es una muestra de que las relaciones entre Cuba y Rusia “empiezan a cambiar”. En vez de “suministrar” empezamos a “desarrollar conjuntamente”, subrayó el funcionario ruso.
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