Rusia no solo es famosa por sus brillantes científicos y fabricantes de armas de fuego, sino que también está llena de artistas que pueden adornar tu casa con... rifles dorados.
El taller Práktika fue fundado en 1991, inmediatamente después del colapso de la Unión Soviética en la pequeña ciudad de Zlatoust (el nombre proviene de una palabra rusa que significa "oro") a más de 1.000 millas al este de Moscú.
Práktika se especializa en la decoración de armas de acero frío. También graba bastones, tinteros, conjuntos eucarísticos, cuchillos de gabinete, platos, bandejas, juegos de copas de vino y coñac, etc. Básicamente, armas y objetos interiores medievales y modernos.
Según una declaración oficial, cada arma con filo está hecha a mano y a medida con el mejor acero de Damasco.
Los herreros y artistas de la compañía también usan maderas raras, hueso de mamut, bronce, cuernos de ciervo, piedras y otros materiales junto con metales nobles como el oro y la plata.
Los artesanos de la compañía han revivido las tradiciones del siglo XIX de decoración con chapado en oro de miniaturas de escenas de batalla.
Según el sitio web de la compañía, armas fabricadas por sus artesanos se pueden encontrar en los castillos de la reina Isabel II y el rey de Jordania.
Si decides visitar Rusia, podrás comprar un dorado Saiga MK-03 (la versión civil del famoso AK-104) por alrededor de 50.000 dólares.
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