La historia del ferrocarril en Rusia en fotos

Kira Lisitskaya (Foto: Universal Images Group/ Getty Images; Dominio público)
La introducción del ferrocarril fue una empresa arriesgada, pero rápidamente cambió el país hasta hacerlo irreconocible.

La historia del ferrocarril en Rusia comenzó en 1834, cuando el famoso ingeniero Franz von Gerstner llegó a San Petersburgo. El ingeniero, que estudió a fondo este tipo de transporte emergente en Europa, llegó a Rusia para revisar las plantas mineras de los Urales.

Franz von Gerstner.

Tras recorrer el vasto país, Franz von Gerstner propuso la construcción de una red de ferrocarriles en el Imperio ruso. En enero de 1835, presentó una nota redactada para el emperador ruso Nicolás I en la que exponía el valor potencial del transporte ferroviario para un país como Rusia.

Georg von Bothmann:

"No hay país en el mundo en el que el ferrocarril sea más rentable e incluso necesario que en Rusia, ya que permite acortar grandes distancias al aumentar la velocidad de los viajes", decía la nota.

En aquel entonces, la idea de construir una vasta red de ferrocarriles era revolucionaria y, por lo tanto, fue recibida con una dosis de escepticismo por muchas personas influyentes dentro del gobierno. La principal preocupación era si las vías férreas serían capaces de soportar las duras condiciones del invierno ruso, cuando las tormentas de nieve y las heladas prevalecen. La otra preocupación era el elevado coste de la construcción de las vías férreas y el equipamiento de éstas con costosos trenes de vapor de fabricación extranjera.

Monumento a los creadores de los ferrocarriles rusos en Moscú.

No obstante, los defensores del ferrocarril consiguieron convencer a Nicolás I de que las vías férreas, aunque costosas, acabarían dando beneficios y también ayudarían a conectar partes distantes del país en las que el transporte solía verse obstaculizado por el mal estado de las carreteras y el mal tiempo en cualquier estación del año, excepto en verano.

El 21 de marzo de 1836, el emperador Nicolás I firmó un decreto que puso en marcha la construcción del primer ferrocarril de Rusia, el ferrocarril Tsarskoselskaia, que conectaba la estación de Tsarskoselskaia en San Petersburgo, Tsárskoye Seló, donde residía la familia imperial rusa, y Pavlovsk.

El ferrocarril de Tsarskoselskaia.

El gobierno planeaba observar cómo este limitado ferrocarril soportaría las condiciones del invierno ruso y hacer una evaluación posterior en base a los resultados.

Uno de los primeros puentes ferroviarios del Imperio ruso.

A continuación, se inició la rápida construcción del primer ferrocarril. A finales de septiembre de 1836, se realizaron los primeros viajes de prueba. Sin embargo, se utilizaron caballos en lugar de locomotoras de vapor para tirar de los vagones durante los viajes de prueba. Tras el éxito de las pruebas iniciales, los ingenieros siguieron adelante.

Una maqueta del primer tren del ferrocarril de Tsárskoye Seló.

La primera locomotora se encargó en Gran Bretaña y se entregó en Rusia a principios de noviembre de 1836. Fue llevada por mar desde Inglaterra a Kronstadt y luego transportada a su destino final a caballo. En Tsárskoye Seló se ensambló y probó. El primer tren en Rusia estaba formado por una locomotora de vapor y ocho vagones que se diferenciaban por clases de confort.

El ingeniero Franz von Gerstner exigía que las locomotoras de vapor tuvieran 40 caballos de potencia y fueran capaces de transportar varios vagones con hasta 300 pasajeros a una velocidad de 40 km/h.

Para aumentar la capacidad del ferrocarril, el gobierno ruso dispuso que el ancho de vía en Rusia fuera de 1.829 mm, más ancho que el de 1.435 mm que se había adoptado como norma en Inglaterra.

El primer ferrocarril de Rusia se inauguró solemnemente el 11 de noviembre de 1837. "Los habitantes de la ciudad acudieron en masa a la antigua iglesia del regimiento en la plaza Semenovskiz. Sabían que se iba a inaugurar un ferrocarril insólito y que "un caballo de acero, que transportaba muchos, muchos carruajes a la vez" iba a partir por primera vez", informaba un artículo periodístico de la época.

Este acontecimiento emblemático marcó el inicio de una nueva era. Pronto, el Imperio ruso cambiaría de manera irreconocible con la introducción del ferrocarril a gran escala.

El 1 de noviembre de 1851 se inauguró el ferrocarril Nikoláievskaia, de 645 km de longitud, que unía San Petersburgo y Moscú. Se construyeron dos estaciones de ferrocarril idénticas en las dos capitales.

La estación de tren de San Petersburgo.
La estación de tren de Moscú.

El auge del ferrocarril en Rusia se produjo en la segunda mitad del siglo XIX. Rusia comenzó a producir sus propias locomotoras. Las empresas privadas se sumaron a la construcción de ferrocarriles, invirtiendo en lo que se consideraba una empresa arriesgada sólo unos años antes. Los ferrocarriles no sólo resultaron rentables, sino que también impulsaron el desarrollo económico y de infraestructuras del Imperio ruso.

En 1875, se habían tendido más de 20.000 km de vías férreas y, a finales del siglo XIX, la longitud de la red ferroviaria rusa era de 53.200 km. A principios del siglo XX se añadieron otros 22.600 km.

Quizá el ferrocarril más famoso del mundo, el Transiberiano, que conecta el oeste de Rusia con el Extremo Oriente ruso, se construyó entre 1891 y 1916. Aún hoy sigue siendo el ferrocarril más largo del mundo, con una longitud de casi 9.500 km.

Trabajador ferroviario soviético. 1920-30.

En el siglo XX, el transporte ferroviario se convirtió en el principal medio de transporte de mercancías y pasajeros en Rusia. Más del 70% de la carga viajaba por ferrocarril en la Unión Soviética. A finales de la década de 1980, la longitud operativa de la red ferroviaria de la URSS era de unos 145.000 km. La red incluía 32 ferrocarriles y más de 11.000 estaciones de tren.

Síguenos en nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes 

Estimados lectores,
Nuestro sitio web y nuestras cuentas en las redes sociales corren el riesgo de ser restringidos o prohibidos, debido a las circunstancias actuales. Por lo tanto, para mantenerte al día con nuestros últimos contenidos, simplemente haz lo siguiente:

Suscríbete a nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes

  • Suscríbete a nuestro boletín semanal por correo electrónico: debajo de cada artículo hay un espacio para hacerlo.
  • Habilita las notificaciones push en nuestro sitio web.
  • Instala un servicio de VPN en tu ordenador y/o teléfono para tener acceso a nuestra web, aunque esté bloqueada en tu país.

LEE MÁS: Haga clic aquí para viajar en el ferrocarril transiberiano en 5 minutos, en lugar de 7 días

La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.

Lee más

Esta página web utiliza cookies. Haz click aquí para más información.

Aceptar cookies