El estallido de la Segunda Guerra Mundial produjo cambios en la apariencia de las mujeres soviéticas. Muchas vistieron uniformes militares, mientras que otras se pusieron los monos de los trabajadores fabriles. Sin embargo, la tan esperada victoria del 9 de mayo de 1945 les permitió relajarse y posar para fotos alegres durante paseos y excursiones a la costa.