El 25 de septiembre de 2002 en la región siberiana de Irkutsk, cerca del río Vitim, explotó un meteorito gigante a una altura de 30 km. La fuerza de la explosión fue equivalente a 200 toneladas de dinamita.
El meteorito de Vitim fue el segundo mayor impacto de un objeto espacial en Rusia desde el meteorito de Tunguska en 1908. Geólogos de Moscú encontraron un área de 100 km cuadrados de árboles caídos y calcinados. También hallaron fragmentos del meteorito.
La destrucción que causó estuvo acompañada de un gran destello en el aire y un ruido enorme que se observó a una distancia de hasta 150 km. Afortunadamente el Vitim terminó su viaje lejos de áreas pobladas. Aunque los locales sí que sintieron un temblor, similar a de un fuerte terremoto.