El sistema de castas de las prisiones rusas, explicado

TASS
Hay castas en las que es realmente difícil entrar. Pero también las hay de las que es absolutamente imposible salir.

 

1. Воры в Законе (‘Vory v Zakone’ o Ladrones en la ley)

Los llamados vori v zakone - o zakonniki (“Ladrones en la ley”) son los reyes del submundo criminal. Este grupo de respetados peces gordos, que controlan la mayor parte del mundo criminal, tanto en la cárcel como fuera de ella, está unido por ciertos temas comunes.

Por ejemplo, la persona que quiera ascender a “ladrón en la ley” debe, en primer lugar, inspirar un respeto inquebrantable entre los ladrones, así como tener numerosas condenas en su haber y aborrecer absolutamente cualquier cooperación con las estructuras policiales del Estado. 

Los zakonniki observan y veneran un estricto código de conducta: la llamada “ley del ladrón”. Sus principios fundamentales son la lealtad a la idea del ladrón y la imposibilidad de cualquier cooperación con las fuerzas del orden en cualquier calidad, incluida la administración penitenciaria.

Cuando están encerrados en “la zona” que es el carcelario argot es una colonia penal de máxima seguridad-, los ladrones supervisan el obschak (la reserva común de efectivo de los delincuentes), además de establecer su propia ley y resolver cualquier asunto y conflicto, según un conjunto de poniatiya -o “conceptos”, un término del argot que solía calar hondo en la lengua vernácula rusa en la época postsoviética, incluso fuera del mundo criminal.

2. Блатные (‘Blatniye’, una casta inferior de ladrones interconectados)

Después de los ladrones en la ley vienen los Blatniye, término que también se traduce vagamente como “ladrones”, complicando ligeramente el asunto. Sin embargo, se trata de una casta ligeramente diferente. Se sitúa justo debajo de la casta superior en la jerarquía carcelaria. Este grupo controla la ley dentro de la zona, donde la vida se desarrolla según la ley de la prisión. Pero, en las zonas, donde la autoridad pertenece a la administración de la prisión, la influencia de los Blatniye se ve a menudo restringida, debido a la ley contra la cooperación con, bueno, la ley real.

A menudo, esta casta está formada por delincuentes profesionales habituales. Sin embargo, un preso que haya servido previamente en la policía o haya trabajado en el sector de los servicios (taxista, camarero, etc.) no puede convertirse en uno de ellos.

En la “zona”, donde esa casta ostenta el poder, sus miembros se encargan de las obschak, así como de abastecer a la prisión de té, cigarrillos y comestibles; también actúan como árbitros en los conflictos entre reclusos, sirviéndose de la mencionada poniatiya para orientarlos.

Los propios blatniye no se autoaplican ese término, llamándose a sí mismos arrestanti (“arrestados”), o brodiagi (“vagabundos”).

3. Мужики (‘Muzhiki’, es decir Hombres/Chicos)

Los muzhiki son la casta más extendida en el sistema de colonias penales rusas. A diferencia de los blatniye, estos tipos no son delincuentes profesionales ni huéspedes habituales de las cárceles. Los miembros de esta casta acaban en la cárcel normalmente como resultado de la comisión de un único delito, en contraposición a una actividad delictiva sistemática. En su mayoría, los muzhiki no cooperan con la administración penitenciaria, pero tampoco participan en la vida de la cárcel, manteniéndose al margen de las disputas internas. Hacen trabajos en la cárcel y esperan no volver a la colonia penal después de cumplir su condena.

4. Активисты, козлы, суки (“Aktivisti, kozli, suke” - Activistas, cabras, perros)

Los reclusos de esta clase social llevan diferentes tipos de apodos. Aceptan de buen grado cooperar con los guardias y pueden ocupar ellos mismos diversos puestos administrativos en la zona.

Son claramente rechazados por las demás castas. En las colonias donde el vorovskoi zakon es la ley, estos reclusos pueden mantenerse separados de los demás en aras de salvaguardarlos de numerosos conflictos sangrientos y/o actos de represalia.

En cambio, en las prisiones en las que la administración tiene un control total sobre lo que ocurre, repartiendo duros castigos por diversos tipos de orden vorovskie, los “activistas” gozan de un mayor grado de seguridad o de una posición privilegiada, así como de que los guardianes les den largas y les proporcionen otras lindezas, que reciben a cambio de cumplir con sus obligaciones.

Por lo general, un kozel (“cabra”) es un nombre reservado para aquellos que destacan por sus acciones (y no por cumplir con un deber penitenciario asignado); sin embargo, si un recluso muestra un deseo activo de cooperar con la administración en aras de obtener algún beneficio, puede estar seguro de que será degradado al rango de suka -una “perra”-.

5. Петухи или опущенные - (“Petuji u opuscheniye” – pollos o avergonzados/descendidos)

Los petuji (“pollos”, también conocidos como “los avergonzados”) son lo más bajo de lo bajo y suelen estar aislados de la población penitenciaria general. Tienen sus propios utensilios de cocina (normalmente marcados con un agujero) y su propio lugar para dormir (a menudo cerca del baño). Tocarles, sus cosas o pedirles prestados alimentos o cigarrillos está estrictamente prohibido para los demás reclusos, no sea que uno mismo sea “degradado” a petuj incluso si el “delito” es accidental.

Los propios opuscheniye deben mantenerse alejados del resto de las castas de reclusos y mantenerse firmes contra la pared cuando pasan, dejándolos pasar. Todo el trabajo sucio (como la limpieza de los aseos, etc) se suele dejar en manos de los miembros de esta casta.

Los “degradados” son los que han cometido una transgresión grave en la “zona” (como no pagar una deuda o robar a otros reclusos), pero también los que cometen delitos o pertenecen a categorías desfavorables en el exterior (ser gay te mete automáticamente en esa categoría). También puede incluir a los que toleraron una ofensa contra ellos mismos, y no buscaron venganza; así como a los que cometieron una ofensa o trataron a otro recluso con deshonor, y no pudieron respaldarlo en el “tribunal” del blatniye u otros testigos de mayor rango. También se puede acabar en la casta por asociarse con los ya degradados, así como por tomar prestadas o utilizar sus cosas, de nuevo, aunque el delito sea accidental.

6. Шестерки, шерстяные, черти, чушки, крысы, мусора и др. - (Shestiorki, sherstianiye, chertee, krisi, musora”, etc. – “chivatos, diablos, ratas, policías, etc.)

Además de las castas principales, la jerarquía penitenciaria rusa incluye grupos menos conocidos y menos numerosos que se pueden encontrar en las instalaciones de todo el país.

Los shestiorki (o “seises”, como el número “6”) son los que se ven obligados a actuar como sirvientes de la clase blatniyeh.

Los Sherstianiye (o “lanas”, como en un jersey) son los que se encargan de coordinar los ataques y las palizas a otros reclusos, normalmente a instancias de la administración.

Los chertee (o “diablos”) sirven para llevar a cabo diversas acciones sucias para otros reclusos a cambio de una recompensa monetaria; los krisi son “ratas”: delatan a otros reclusos; musora , una forma plural inexistente de “basura” es un término del argot ruso para “policía”: son antiguos agentes de la ley han acabado entre rejas. 

LEE MÁS: 5 tipos de castigos corporales que eran aplicados en la antigua Rusia

La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.

Lee más

Esta página web utiliza cookies. Haz click aquí para más información.

Aceptar cookies