La empresa AMT, con el apoyo del Fondo Skólkovo, ha comenzado la realización de un proyecto para la construcción de un asentamiento de prueba de 1,5 hectáreas no lejos del asentamiento de Tunoshna en la región de Yaroslavl. Habrá 12 edificios en el asentamiento, realizados en diferentes estilos arquitectónicos. La característica especial básica de estos objetos será que se realizarán con la ayuda de una impresora 3D. Este será el primer y único asentamiento de este tipo en Rusia.
Las casas se construirán con la impresora de construcción S-300. Según el director ejecutivo de AMT, Alexánder Maslov, la impresora 3D de construcción es casi indistinguible de los dispositivos ordinarios que imprimen objetos con plástico fundido. Pero gracias a sus grandes dimensiones, le permite “imprimir”un objeto arquitectónico de cualquier nivel de complejidad.
La empresa ya está completando la construcción de la primera instalación, cuyo metro cuadrado del cual cuesta unos 20 mil rublos (230 euros). Se prevé que la segunda casa (una villa de 100 metros cuadrados) se construirá en 30 horas. En la tercera casa, los constructores planean mostrar “las capacidades de una impresora 3D de construcción en términos de la complejidad del diseño”. Ya se han instalado agua, luz y alcantarillado en todas las parcelas.
La empresa explica que todas las casas “impresas” se utilizarán como hoteles en el centro de formación de AMT, donde realizarán capacitaciones para la construcción en impresoras 3D, todas ellas “legales” y registradas en catastro.
Esta no es la primera experiencia de AMT con una impresora. En 2017 imprimió la primera casa con esta técnica en la región de Yaroslavl.
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