El 12 de enero de 2021 Telegram se convirtió en la segunda aplicación más descargada en EE UU y el fundador de la plataforma, Pável Dúrov, anunció en su canal que en tres días se habían unido a la aplicación 25 millones de nuevos usuarios. Hay gente de todo el mundo: de Asia (38%) , Europa (27%) y América Latina (21%). Otro 8% proviene de Oriente Medio. El número total de usuarios ha superado los 500 millones.
Telegram empezó a crecer de manera vertiginosa después de que las cuentas de Donald Trump en Twitter, Facebook, Instagram y otras plataforma fueran bloqueadas el pasado 7 de enero. Otro factor que impulsa a los usuarios a acudir en masa a Telegram es la nueva cláusula de confidencialidad de WhatsApp, por la que los datos personales de los usuarios se ponen a disposición de Facebook (propietario de WhatsApp). La actualización de las condiciones de uso se retrasó posteriormente hasta el 15 de mayo de 2021, a raíz de una protesta de los usuarios.
“La gente ya no quiere cambiar su privacidad por servicios gratuitos. Ya no quieren ser rehenes de los monopolios tecnológicos que parecen pensar que pueden salirse con la suya siempre que sus aplicaciones tengan una masa crítica de usuarios”, comentó Dúrov acerca de estos cambios.
¿En qué se diferencia Telegram de otras aplicaciones de mensajería?
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Los chats individuales y de grupo son solo una pequeña parte de la infraestructura de esta aplicación de mensajería.
Por ejemplo, se pueden crear chats secretos en Telegram vinculados a un dispositivo de un usuario específico, es decir, no se guardan en los servidores de la plataforma y, a petición del usuario, pueden borrarse por completo después de un cierto período de tiempo. Se puede establecer un límite de tiempo para cualquier foto o vídeo dentro de estos chats y al expirar también se autodestruirán. Se pueden hacer capturas de pantalla pero si se hace la aplicación avisará al otro usuario sobre ello.
Por otro lado, Telegram cuenta con canales además de los populares grupos que hay en WhatsApp. La diferencia clave es la ausencia total de algoritmos. Bajo el enfoque de Telegram, los propios usuarios controlan su uso de los medios: todos los mensajes son publicados por el canal cronológicamente. La aplicación tampoco tiene la función de descubrir, popular en otras aplicaciones modernas. Se supone que los usuarios pueden conocer nuevos canales interesantes, ya sea a través de mensajes reenviados por amigos u otros canales, o de fuentes externas. Los canales pueden ser abiertos o anónimos, los mensajes pueden incluir comentarios y un chat público puede estar vinculado a un canal.
Otra característica interesante es que se puede conocer a gente mediante geolocalización. Si, por ejemplo, te encuentras en una ciudad desconocida, te aburres y quieres conocer a alguien, haz clic en “Contactos”, selecciona “Encontrar gente cerca” y verás una lista de todos los que están en los alrededores (y que han activado esta función). Además, los usuarios crean periódicamente chats para un lugar específico, ya sea un museo, una plaza de la ciudad o un bar. También puedes pasarte por allí, hacer una pregunta o empezar a chatear con una persona cercana.
Telegram también tiene numerosos bots que calculan el tipo de cambio del dólar, te permiten escuchar cualquier canción desde el interior de la aplicación, crear un feed de noticias personales y así sucesivamente.
Además, tiene una cómoda versión de escritorio y una versión web que no requiere un canal de comunicación en funcionamiento vinculado a un teléfono inteligente como WhatsApp o Viber.
¿A quién pertenece todo esto?
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Según informes oficiales, Pável Dúrov, fundador de la popular red social rusa VKontakte, creó Telegram junto con su hermano Nikolái. La primera versión de la aplicación apareció en la App Store en agosto de 2013. Dúrov sigue afirmando que Telegram está creciendo y desarrollándose gracias a su inversión personal (hecha desde VKontakte). En una entrevista con la revista Fortune en 2016 dijo que estaba gastando un millón de dólares al mes en el apoyo a la plataforma de mensajería.
En 2014 Pável Dúrov dejó el puesto de director general de VKontakte, vendió sus acciones en la compañía y dejó Rusia. En su propio blog dijo que se había producido tras un cambio en los accionistas de la red social en 2013. Antes de esto, uno de los accionistas había empezado a acusar a Dúrov de trabajar en su proyecto personal, Telegram, en detrimento de la red social.
Inicialmente, Telegram no estaba en ruso y se dirigía a un público más global. La plataforma de mensajería sólo se adaptó al ruso en 2017.
Cómo trataron de bloquear Telegram en Rusia
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En 2017 el servicio de seguridad de Rusia, el FSB, exigió que Telegram suministrara las claves de codificación para las comunicaciones entre usuarios sospechosos de planear actos terroristas. Los representantes de Telegram se negaron a compartir los datos, y afirmaron que era técnicamente imposible. Como consecuencia de ello, en 2018 el Servicio Federal de Supervisión de Comunicaciones, Tecnología de la Información y Medios de Comunicación [Roskomnadzor], el organismo responsable de vigilar el cumplimiento de las leyes en Internet, bloqueó oficialmente el acceso al Telegram en Rusia. Sin embargo, la aplicación de mensajería seguía siendo accesible a través de VPN. Además, sus desarrolladores pronto aprendieron a evitar el bloqueo para que funcionara incluso sin necesidad de conectarse a servicios de terceros, aunque todavía había fallos de funcionamiento poco frecuentes.
En junio de 2020 Roskomnadzor desbloqueó el acceso a Telegram, declarando que el servicio “tiene una visión positiva de la voluntad de contrarrestar el terrorismo y el extremismo expresada por el fundador de Telegram”. La empresa había desarrollado un sistema para evitar los actos de terrorismo y al mismo tiempo lograr preservar la confidencialidad de las comunicaciones, escribió Dúrov.
También se informó de que Dúrov tenía previsto lanzar una criptografía basada en Telegram. ¿Es esto cierto?
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No solo una moneda. Durov había estado planeando el lanzamiento de toda una plataforma de pagos de cadena de bloques, TON (Telegram Open Network), que comprendería la propia aplicación de mensajería de Telegram, la criptodivisa Gram, y también herramientas de almacenamiento de datos.
En 2018 Durov logró atraer 1.700 millones de dólares de 175 inversores para el proyecto, prometiéndoles un pago de 2.900 millones de en Gram después de su emisión. Se suponía que la plataforma debía haber sido lanzada a finales de octubre de 2019, pero el 11 de octubre la Comisión de Valores y Bolsa de los Estados Unidos (SEC) presentó una demanda en el Tribunal de Distrito del Distrito Sur de Nueva York acusando a Telegram de hacer circular ilegalmente fichas digitales no registradas que la SEC clasificó como valores, no como moneda.
En marzo de 2020 el tribunal de Nueva York dictaminó que Gram no era una moneda sino un valor y prohibió su emisión y distribución a los inversores en los EE UU y en todo el mundo. Dúrov firmó un acuerdo de liquidación voluntaria con la SEC bajo el cual tuvo que pagar a los inversores 1.200 millones de dólares. En mayo del mismo año, Dúrov anunció el cierre de TON, y en junio pagó la totalidad de la deuda.
¿Qué pasará ahora con Telegram?
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En diciembre de 2020 Dúrov anunció que a partir de 2021 Telegram comenzaría a generar ingresos. Según el fundador de la aplicación, el proceso no iba a ser “intrusivo” y todos los servicios existentes seguirían siendo gratuitos para los usuarios, y no habría publicidad en los chats. Dúrov planea ganar dinero con funciones adicionales para los equipos de negocios y para los usuarios con requerimientos más extensos, por ejemplo, stickers de pago.
“Vamos a ofrecer nuestra propia plataforma de publicidad para los canales, asegurando la conveniencia y la confidencialidad para los usuarios, al tiempo que nos permite cubrir los costos del servidor y el tráfico”, escribió Durov en su canal de Telegrama. La plataforma no regula actualmente la publicidad en sus canales.
A raíz de este anuncio, en enero de 2021 varios inversores occidentales ofrecieron comprar una participación de aproximadamente el 5-10% de Telegram, con una valoración total de 30.000 millones de dólares. Dúrov rechazó la propuesta, informóThe Bell, citando fuentes propias. The Information también señaló que habían ofrecido a Dúrov una financiación de deuda de 1.000 millones de dólares, pero que no había tomado una decisión final al respecto. Según la web de noticias, la deuda podría transformarse en acciones en una eventual oferta pública, mientras que el efectivo resulta necesario la expansión y financiación de Telegram, antes del lanzamiento de las acciones en bolsa.
Si la aplicación sigue creciendo, podría prepararse para una OPI. ¿Significa que todo seguirá igual con Telegram?
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No del todo. Parece que existe un riesgo real de que Telegram sea eliminado de la App Store. En caso de que ocurra sería mucho más difícil construir una base más grande de usuarios.
El 17 de enero de 2021, la organización estadounidense Coalition for a Safer Web presentó una demanda contra Apple exigiendo la eliminación de Telegram de la App Store, informó el Washington Post.Según la organización, en el período previo al asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, en la aplicación se difundieron declaraciones extremistas y Telegram no tomó ninguna medida para bloquear estas declaraciones. Dúrov aún no ha hecho comentarios sobre las acusaciones, aunque el ministro de Relaciones Exteriores de la Federación de Rusia, Serguéi Lavrov, ya ha reaccionado.
“He oído que Telegram ha sido amenazado con perder los medios para prestar sus servicios. Va a ser interesante”, dijo Lavrov.
El propio Pável Dúrov ha sido duro con Apple en más de una ocasión. En particular, criticó la comisión del 30% en la venta de aplicaciones de terceros en la App Store. Dúrov dice que Apple está censurando algunas aplicaciones, monitoreando a los usuarios y forzando a los desarrolladores de aplicaciones a mostrar más publicidad para ganar dinero.
Además, Dúrov también criticó la decisión de Apple y Google de eliminar de sus tiendas la aplicación Parler, popular entre los partidarios del expresidente de EE UU, Donald Trump. El ruso pidió a todos los usuarios que se cambien a Android.
“Apple es la más peligrosa de las dos porque puede restringir completamente las aplicaciones que usas, mientras que en Android puedes instalar aplicaciones autoalojadas como APKs.<...> En cuanto a iOS, estamos trabajando en una aplicación web con muchas características que se ejecutará en Safari casi tan suavemente como la aplicación nativa. Todavía no es lo mismo, pero funcionaría”.
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