Los primeros grandes resfriados llegaron a Siberia occidental en vísperas del nuevo año. Por ejemplo, en Novosibirsk, la temperatura del aire estuvo en alrededor de 40 grados bajo cero durante varios días.
Debido al frío, muchos residentes se quedaron en casa. Calles vacías, niebla espesa y escarcha convirtieron a Novosibirsk en una “ciudad fantasma congelada”. Se ve especialmente impresionante en fotos que han circulado en redes sociales.
LEE MÁS: ¿Cómo es vivir en el lugar más frío de Rusia, con una temperatura media de -45C en invierno?