Sin embargo, en términos de dimensiones, gana el original. Después de que un bloguero publicara fotos del edificio de casi 9 metros de altura, el proyecto atrajo la atención de los medios de comunicación rusos.
Con un peso de unas 400 toneladas, esta pirámide está hecha de hormigón y es 19 veces más pequeña que una de las Siete Maravillas del Mundo. Según la información sobre recogida de Instagram, que está en marcha desde 2019, se explica que el edificio formará parte de un complejo cuyo objetivo será estudiar desde el punto de vista científico “la influencia de los edificios egipcios en la condición física del hombre”.
Como explica el autor del proyecto, Andréi Vajrushchev, citado por Euronews, se esforzó por acertar en cada centímetro, de modo que el margen de error en términos de proporciones fuera mínimo. Para su esposa Viktoria, que es una apasionada de la historia de Egipto, es la realización de un sueño. Ella cree que las cámaras subterráneas son perfectas para la meditación, mientras que el sarcófago de madera lleno de arena de sílice se utiliza para celebrar sesiones de fitness.
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