Al combate solo van los veteranos (Leonid Bikov 1973)
Nada mejor para elevar la moral en estos días de incertidumbre que la historia de un escuadrón de pilotos soviéticos que luchan en la Segunda Guerra Mundial. Con un guion basado en los recuerdos de las vivencias de sus componentes, la película muestra la crudeza de la guerra con buen humor, salpicando de comedia varios pasajes del film.
Todo irá bien (Dimitri Astraján, 1995)
Tercer trabajo del director Dmitri Astraján, es una agradable comedia a modo de cuento de hadas, con una Cenicienta que vive en una pequeña ciudad de provincias, a la que se le aparecerá un príncipe azul, un inteligente joven hijo de un nuevo millonario. Pero no solo la chica, sino también otros muchos viven su sueño dorado.
Problemas con suerte (Levan Grabriadze, 2011)
Slava Kolótilov es un maestro que llega a Moscú con el manuscrito de su novela debajo del brazo, decidido a conquistar la ciudad. Al poco, él y la preciosa Nadia se enamoran. Se acerca el día de la boda; el restaurante está reservado, las invitaciones se han mandado, pero Slava no puede escapar de las garras de Dedos, el director del colegio en el que trabaja, que le obliga a ser el entrenador del equipo de fútbol en los campeonatos de la provincia.
El camino a Berlín (Serguéi Popov, 2015)
¿Cansado de ver la misma vista desde la ventana? ¿De no poder salir a correr por la calle? Quizás te sentirás mejor viendo las duras condiciones en las que las tropas soviéticas cruzaron los ríos Oder y Neisse, y sus esfuerzos por derrotar al ejército alemán a apenas 60 kilómetros de Berlín.
Los 28 hombres de Panfilov (Andréi Shalopa, 2016)
En 1941, 28 soldados de la 316ª División de Fusileros del Ejército Rojo estacionados cerca de Moscú detuvieron 54 tanques alemanes durante varios días. Esta película es pura gasolina para resistir el confinamiento en casa.
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