Todo comenzó como una idea para un regalo. El residente de San Petersburgo Maxim Kosmin se aficionó por las postales prerrevolucionarias de humor burlón y creó en Internet una comunidad donde comenzó a compilarlas.
Su colección está formada actualmente por alrededor de 200 tarjetas postales. Las casas de subastas y los mercadillos son sus principales fuentes. Cada tarjeta es un gran ejemplo del mejor humor ruso prerrevolucionario. ¡Disfrútalas!
“Dos tontos pelean mientras un tercero mira”.
“Evolución de un ruso”.
Trampa para hombres
Un vegetariano: “Si consigo escapar, prometo empezar a comer carne”.
“Si no hubieras difundido rumores y mentiras, el ratón no te habría devorado la lengua”.
“No puedo entender el frío de tu alma”.
“Un teléfono”.
“Un encuentro intensa”.
“Iba camino a mi ganado y Dios te envía”.
“*NO* Te amo. (Símbolo de la higa). Saludos desde San Petersburgo”.
“Feliz cumpleaños”.
“Recuerda, coquetear con el primer hombre disponible puede acabar en tener una hija o un hijo”.
“¡Oh, no mientas!”
“En la era feminista. Déjeme que le acompañe a casa, caballero”.
“Defensora de la igualdad de género en un cuarto de baño de hombres”.
Aritmética marital. ¿Y qué me dices de esa costumbre tuya de llamarme “mi mitad” delante de todos? No soy “la mitad”, soy “el todo”.
“Petulancia”.
“Cristo ha resucitado”.
Bomberos intentando contener las llamas del amor.
“Maldita sea. Llevo dos horas llamando. No duermen... hacen ruido todo el tiempo. ¿Pero no abren (la puerta)?”
“Un dandy de San Petersburgo”.
“Tus charlas ‘interesantes’ provocan bostezos”.
“No me envidies. Estoy liado toda la semana. Todos los días tengo que visitar a una de mis esposas”.
El caballo: “Estoy confuso... El hombre aprieta las riendas como si quisiera que me detuviera y hace chasquidos con los labios como si quisiera que siguiera”.
“Casado”.
“Divorciado”.
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