“¡Soy madre! ¡Tengo un hijo pequeño! No se me puede exigir responsabilidades. Conduzco por donde quiero”. En YouTube apareció un video de una mujer enfurecida gritando a los transeúntes que bloqueaban el paso de su vehículo deportivo... y es que estaba conduciendo por la acera. El video rápidamente llegó a la televisión federal.
La verdad es que es difícil sorprender a los rusos con imágenes de conductores que se saltan las normas de tráfico cuando les conviene. Lo que escandalizó a muchos fue que justificara su comportamiento irresponsable diciendo que es madre.
Perdona, pero no es una excusa válida.
Los videos que muestran a jóvenes y rebeldes madres luchando por su “derecho” a robar, romper o gritar a extraños se difunden por el segmento ruso de Internet como la pólvora. Cada vez es más habitual ver a los niños de parapeto o excusa del comportamiento antisocial de estas desenfrenadas madres jóvenes, incapaces de mantener a raya sus emociones.
En el video de aquí abajo se puede ver a una mujer destrozando una tienda de alimentación mientras el niño observa lo que ocurre atónito y en silencio.
Hay uno en el que una desvergonzada madre de tres niños se pelea con el equipo de una ambulancia, que espera la llegada de un paciente, porque la mujer no quiere cambiar su ruta habitual.
A menudo el egoísmo de estas madres viola todas las fronteras morales imaginables. En este video, en lugar de coger algo de ropa interior extra para su hija antes de un vuelo, esta joven madre piensa que puede ponerse a secar una braga mojada usando el sistema de aire acondicionado del avión. ¡Al diablo con los demás pasajeros, soy una madre!
Esta arrogancia injustificada de las jóvenes madres ha provocado una fuerte resistencia en una parte de la sociedad rusa.
“En estos días se está produciendo un aumento en el número de madres con un comportamiento inadecuado. Chantajean, violan las reglas de tráfico, justifican [su comportamiento indisciplinado] aludiendo a los hijos. En países como Noruega, la gente habría llamado a la policía y se habrían llevado a los niños”, afirmó la modelo de Instagram, María Pogrebniak, en un programa de televisión dedicado al fenómeno.
Los psicólogos afirman que estas agresiones y la gran irritación de las madres jóvenes se debe al agotamiento y es un síntoma que necesita ser tratado.
“Cuando una madre joven tiene un brote agresivo, es una buena noticia. Significa que todavía tiene fuerzas para reaccionar. La irritación de una madre es un signo de que ya no le quedan fuerzas para una respuesta adecuada, para ser flexible, para tener sentido del humor, para ponerse en otro lugar, para la diplomacia y la tolerancia. Pero aún tiene fuerzas para defenderse.
La mala noticia es que no es la reacción más armoniosa y causa un sentimiento de culpa en la propia madre. La agota todavía más. La siguiente etapa es la depresión, la apatía, las lágrimas. La irritación es un síntoma, y una razón para hacer algo antes de que se acaben las fuerzas [de una mujer]”, escribió Svetlana Rois, psicóloga familiar, en un artículo aparecido online (enlace en ruso).
No todo el mundo es tan comprensivo como esta psicóloga.Ya zhe mat (Soy madre), una frase que la mayoría utiliza para justificar su comportamiento, se ha convertido en un meme en todo el país y en un popular hashtag: #ЯЖЕМАТЬ (#yazhemat).
Se trata de una manera de referirse a las mujeres agresivas que exigen impunidad por el mero hecho de tener hijos. Actualmente en las páginas de los medios de comunicación online aparecen numerosas historias sobre estas madres, que se publican con el hashtag. El alcance del problema resulta llamativo.
Como nota positiva hay que decir que algunas personas creativas lo han convertido en una fuente de inspiración. Hay, por ejemplo, un canal de humor en YouTube que se burla de aquellas que se han ganado el estigma de #yazhemat.
Y si esto fuera poco... te damos siete razones para no quedar con una mujer rusa.
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