Desde el inicio del Programa 5-100 hace dos años, las universidades rusas se han hecho notar en el mercado internacional de la educación, explica Phil Baty, editor jefe de la revista Times Higher Education (THE).
El Programa 5-10, financiado por el Estado, aporta fondos a 15 universidades rusas con el objetivo de incrementar su competitividad internacional. Para 2020, el Ministerio de Educación y Ciencia quiere que cinco universidades rusas estén entre las 100 primeras en tres ránkings mundiales: el Ránking de Universidades del Mundo de THE (Times Higher Education), los Ránkings de Universidades Mundiales de QS y el Ránking Académico de Universidades Mundiales.
Solo dos universidades rusas fueron incluidas en el Ránking THE de 2015. http://www.timeshighereducation.co.uk/world-university-rankings/2015/reputation-ranking La Universidad Estatal de Moscú Lomonósov ocupó el puesto 25 y la Universidad Estatal San Petersburgo, el 78. de El MIT y la Universidad de Harvard ocupan las dos primeras posiciones. La lista incluye 400 universidades y 108 de ellas son de EE UU.
Por su parte, el ránking QS incluye 21 universidades rusas. La Universidad Estatal de Moscú Lomonósov y la Universidad Estatal de San Petersburgo están en los puestos 114º y 233º respectivamente, en un grupo de más de 700 instituciones. En 2013 había 18 universidades rusas y en 2012, solamente 14. En el baremo de 2014-2015, los EE UU estaban representados por 150 instituciones educativas, con MIT a la cabeza.
Irina Abankina, directora del Instituto de Desarrollo de la Educación en la Escuela Superior de Economía (con el puesto 501º en el ránking QS de 2015-2015), afirma que el Ministerio de Educación y Ciencia tiene la intención de identificar las universidades con un mayor potencial y redistribuir los fondos http://es.rbth.com/cultura/2013/07/19/las_universidades_no_se_adecuan_a_las_necesidades_de_la_economia_30239 entre ellas.
Abankina añade que en la actualidad el 40 % del presupuesto del Ministerio se destina a unas 35 universidades. Además de las 15 universidades participantes en el Programa 5-100, esta categoría selecta incluye universidades y centros de investigación federales y nacionales. En 2015, las universidades del Programa 5-100 recibirán un total de 10.140 millones de rublos (alrededor de 150 millones de dólares).
A la pregunta de si está satisfecha con los resultados inmediatos del programa, Dmitri Livánov, el ministro de Educación, confesó: “Ha pasado muy poco tiempo aún como para que el Gobierno pueda transformar las universidades y aumentar la calidad de su trabajo”. Livánov fue rector de una de las universidades participantes en el Programa 5-100, la Universidad Nacional de Ciencia y Tecnología MISiS. El ministro espera que las instituciones de educación superior muestren un progreso substancial el año académico 2016-2017.
Sin embargo, ya se puede apuntar hacia algunas conclusiones. Según Phil Baty, durante los últimos años la Universidad Estatal de Moscú ha realizado progresos considerables. Está en el 25º puesto en el Ránking de Reputación Mundial del Times Higher Education 2015. Esta universidad no participa en el Programa 5-100, pero Abankina cuenta que colabora estrechamente con los grupos de expertos.
El editor jefe de THE no ha revelado los detalles de la baremación 2015-2016, que se publicará el próximo 1 de octubre, pero, ya que últimamente la Universidad Estatal de Moscú ha estado realizando impresionantes progresos en los ránkings, “predice que habrá más buenas noticias cuando publiquemos la lista de las mejores universidades del mundo de 2015-2016”.
El portavoz del Programa 5-100 dice que, aparte de su ascenso en los índices, el progreso de las universidades puede ser determinado por “los cambios cualitativos que darán fruto en un futuro próximo”. Por ejemplo, en los dos últimos años, nueve de las quince universidades que participan en el programa han duplicado su número de publicaciones científicas.
“El mayor desafío es saber si la reforma y la investigación llegarán lo suficientemente lejos”, dice Phil Baty. Añade que muchos otros países en desarrollo han reconocido la importancia de invertir en sus universidades para impulsar la economía del conocimiento. “Supone un gran esfuerzo el simple hecho de competir en la carrera global y, por supuesto, las principales universidades occidentales han acumulado grandes dotaciones económicas y pueden atraer elevadas inversiones privadas”, explica Baty.
Rusia debe trabajar duro para atraer y retener talentos punteros de todo el mundo, afirma Baty. “En el pasado, hubo demasiados excelentes investigadores rusos que dejaron su país para desarrollar sus carreras en otros lugares. Esto debe cambiar. Las reformas lo reconocen”.
¿Quiere recibir la información más destacada sobre Rusia en su correo electrónico? Suscríbase a nuestros boletines semanales y reciba cada viernes el material más interesante.
Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: