No te dará superpoderes para controlar la gravedad, pero seguro que es un placer para tus sentidos. Los más probable es que no hayas oído hablar de este paste pastel relleno de chocolate, que era uno de los favoritos de Yuri Gagarin, el primer cosmonauta de la historia.
Una corteza crujiente, chocolate cremoso y un aire de frutas del bosque. ¿Qué más se necesita para contar con el postre perfecto?
Ingredientes:
400g de harina
250g de mantequilla
250g de azúcar
250g de frutos del bosque (nosotros usamos arándanos, pero las cerezas son también una buena opción)
4 huevos
15g de chocolate en polvo
10g de levadura en polvo
70g de polvo de kissel (el kissel es una bebida de frutas; si no lo puedes encontrar echa dos cucharadas de Farina)
Mezclar bien la harina con la mantequilla hasta que quede en polvo.
Añadir 50 g de azúcar y la levadura. Remover bien.
Separar la clara y la yema de los huevos. Hacer un hueco en el centro de la masa y echar las yemas. Mezclar bien.
Corta la masa en tres partes. Mete durante 30 minutos el trozo más pequeño en la nevera. Añade el chocolate en polvo al pedazo mediado. Haz una bola con este trozo. Deja esta pelota de chocolate en la nevera durante 20-25 minutos.
Extiende el trozo más grande en una bandeja de horno. Dejar una hora en la nevera.
Colocar los frutos secos, previamente pasados por la harina, encima de de la masa fría. Tomar el trozo de masa de chocolate y rallarlo sobre la capa de frutos del bosque.
Batir la clara de huevo a punto de nieve mientras se va añadiendo gradualmente el azúcar. Batir hasta que la mezcla se solidificia.
Añadir el polvo de kissel (o la farina) y seguir batiendo.
Rallar la pieza de masa más pequeña encima de la mezcla. Meter el pastel en el horno precalentado durante una hora a 160 ºC.
Priyántnogo apetita!
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