El 16 de abril se inauguró una nueva terminal en el aeropuerto internacional de Simferópol en Crimea. Se ha construido en un tiempo récord, en tan solo 22 meses y espera acoger a 6,5 millones de pasajeros al año. Reemplazará a la antigua terminal, que ha tratado de lidiar con el aumento del tráfico de pasajeros desde 2014. El año pasado pasaron por allí 5,1 millones de pasajeros.
La nueva terminal es tres veces más grande que la anterior y se ha convertido en el mayor aeropuerto en el sur del país.
Situado en el pueblo de Ukrómnoi, a 5 km de la vieja terminal y a 14 km de la ciudad, la nueva terminal tiene un área de 78.000 metros cuadrados en las afueras de la ciudad y tiene forma de ola. El diseño es obra del estudio de arquitectura e ingeniería surcoreano Samoo, que se inspiró en la impresionante naturaleza de Crimea y decidió hacer que esta fuera el tema central de su proyecto.
En total se han utilizado 7.000 toneladas de metal en la construcción. Supone 300 toneladas menos de las utilizadas para la construcción de la torre Eiffel de París.
Ha tenido un coste de 32.000 rublos (520 millones de dólares), que han servido para transformar el antiguo lugar que acogía un campo de amapolas en una moderna terminal. Alrededor del 30% de la financiación proviene de inversiones privados y el resto son fondos públicos.
En el interior de la terminal hay 55 puntos para hacer el embarque, ocho pasarelas de acceso a las aeronaves y ochos puertas normales, además de 16 escaleras móviles y 28 elevadores. Todo tiene un aspecto moderno, ligero y es muy espacioso. Cuenta también con restaurantes, cafés, tiendas y puntos de entretenimiento.
Aunque la principal atracción para todos los que lleguen o partan será el gigantesco muro verde. Al parecer, con sus 1.600 metros cuadrados es la mayor estructura de Europa de plantas de interior. El muro tiene 15 metros de altura y 110 de lago y contiene tanto plantas artificiales como naturales, pero los diseñadores aseguran que los visitantes no podrán distinguirlas.
Además el aeropuerto contará con su propio parque con plantas que habitan la península. “Las plantas se elegirán de tal manera que cambien de color según la estación”, afirma el servicio de prensa del aeropuerto. “Continuaremos manteniendo nuestro estatus como uno de los aeropuertos más ecológicos”.
El aspecto moderno del aeropuerto ha hecho que sea rebautizado de manera no oficial con el nombre de “cosmoport”, así que la inauguración de la nueva terminal fue como una especie de espectáculo de las galaxias, con robots contando historias acerca del aeropuerto y de personajes de la saga de Star Wars pululando por ahí.
El aeropuerto internacional de Simferópol abrió sus puertas en 1936, pero actualmente solo tiene vuelos domésticos dentro de Rusia.
Desde 2014 Rusia ha trabajado en un proyecto monumental en la península, el puente de Crimea. En Russia Beyond ya hemos escrito sobre algunos hechos curiosos relacionados con este puente.
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