La criatura gelatinosa en un líquido marrón en un tarro de cristal de tres litros en el alféizar de la ventana aterrorizaba a los niños soviéticos. Sin embargo, los adultos consideraban esta bebida agridulce un “superalimento” para la digestión, la microflora intestinal y una cura para la resaca. Es más, tuvo que ser cultivado literalmente, lo que a mucha gente le pareció fascinante.
El hongo del té, o kombucha, es una bebida fermentada a base de té dulce, levadura y bacterias del ácido acético. El propio hongo es una zoogloea (un “cuerpo” mucilaginoso formado por la actividad vital de las bacterias). El cultivo bacteriano se colocaba en té azucarado -su medio nutritivo- y se dejaba infusionar. Al cabo de un tiempo, se convertía en un “hongo de té” que podía tomarse como bebida refrescante e incluso convertirse en una bebida ligeramente embriagadora. Y para cultivar un tarro de hongo de té sólo había que picar un trozo de la masa bacteriana formada en el tarro de un vecino; por suerte, el famoso hongo “vivía” en casi todos los pisos soviéticos.
En comparación con las setas de té, este alimento saludable no era una amenaza abstracta en el alféizar de la ventana, sino una auténtica pesadilla para un niño soviético. En ese momento existía la creencia de que sin aceite de hígado de bacalao es absolutamente imposible que una persona creciese sana. En parte era cierto: una dieta equilibrada rica en Omega era prácticamente un lujo. Así que los niños, a pesar de su feroz oposición, recibían la grasa directamente de la cuchara; entonces no había cápsulas (que les protegieran del olor y el sabor). Y el aceite de pescado también se prescribía para el raquitismo y para restaurar la inmunidad después de algunas enfermedades, ya que estaba lleno de vitaminas A y D
Parecía una barrita chocolate y a los niños les encantaba, pero ¿sabes lo que es realmente? Albúmina de suero bovino, o lo que es lo mismo, sangre bovina.
En una ocasión se descubrió que sólo las proteínas animales tienen hierro, que es absorbido por el cuerpo humano. El hematógeno se utilizaba para tratar la anemia y la debilidad, para administrarlo después de una pérdida de sangre profusa, o simplemente “para enrojecer las mejillas”. Y para que la gente no pensara en la sangre tan a menudo, en la URSS se empezó a mezclar con leche condensada, melaza y cacao, y se vendía en forma de pequeñas barritas con bonitos envoltorios. Anteriormente, hasta los años 40, el hematógeno era un medicamento compuesto por sangre bovina, glicerina y vino. El formato de una barrita era mucho más atractivo.
La madreselva era la baya de goji soviética. Esta popular baya tiene un color similar al del arándano, pero contiene tres veces más antioxidantes y un contenido de magnesio y sodio sin igual. Además, la madreselva madura muy pronto: es la primera baya que aporta vitaminas después del invierno. El producto de desintoxicación tiene muchas variantes en cuanto a su consumo. Se ha utilizado para hacer kompot (una bebida dulce sin alcohol), jaleas, mermeladas, batidos y pasteles. Por último, se limitaban a beber el zumo de la fruta tres veces al día, a cucharadas.
Esta era la fuente más barata y accesible de yodo en la Unión Soviética. Al principio, la sal no se yodada, y había que mantener el nivel suficiente de yodo en el cuerpo comiendo la ensalada llamada “Dalnevostóchnaia” (Del Extremo Oriente) compuesta por las algas laminaria que recibieron el nombre de la ‘col del mar’. En la Unión Soviética, las algas se vendían exclusivamente en latas selladas. El problema era que a los soviéticos no les gustaba mucho comer algas duras y “gomosas”, por lo tanto, empezaron a repartir los botes de la algas en las fábricas. Así, el yodo saludable resultó ser obligatorio en todo el país.
Es cierto que las amas de casa soviéticas resolvieron el problema de las algas a su manera: empezaron a mezclarlas con otros ingredientes -huevos, queso, mayonesa- cualquier cosa que suavizara el sabor de las algas.
Otro alimento enlatado, pero, a diferencia de las algas, muy buscado. Este manjar del Lejano Oriente aún se pudo adquirir libremente en los mostradores soviéticos de la Rusia central y europea durante un tiempo, pero sólo hasta que se hicieron ciertas pruebas con él. Cuando la gente se enteró de sus útiles propiedades, desapareció por completo del mercado. Al fin y al cabo, la cucumaria es un tipo de otro molusco marino más valioso, el trepang.
Aunque la cucumaria tiene un aspecto repulsivo por fuera, sabe mucho mejor de lo que aparenta Su pulpa se empezó a preparar en salsa de tomate, en un salteado de verduras o en un plato de plov. Pero eso no es lo más importante. Es más fácil decir para qué NO sirve la cucumaria, porque su gama de beneficios es muy amplia. Es útil contra los problemas de tiroides y huesos, limpia la sangre de colesterol y azúcar, acelera la regeneración celular, normaliza la presión arterial, aumenta la potencia y contiene muchos ácidos grasos.
El caviar negro en la Unión Soviética no sólo se utilizaba para acompañar los chupitos con vodka o como moneda de cambio, sino también para tratar a los niños. En los años setenta y ochenta, los pediatras aconsejaban dársela a quienes padecían de falta de hemoglobina y de hierro, y las madres cuidadosas se la daban con cuchara a sus hijos.
Este producto es un superalimento absoluto: refuerza el sistema cardiovascular, la visión y aumenta la actividad cerebral. No en vano, fue designado como el principal dopante del país (como alternativa a los fármacos dopantes prohibidos) y la selección nacional de fútbol de la URSS fue provista de él en los Juegos Olímpicos de Seúl en 1988. Por cierto, ese equipo olímpico ganó, por segunda vez en la historia. Pero tampoco se recomienda abusar del caviar negro: puede producir piedras en el riñón.
LEE MÁS: 5 cosas que los rusos comieron durante siglos
La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia:
