La Justicia rusa anunciará hoy la pena para la piloto ucraniana Nadezhda Sávchenko, declarada culpable del asesinato de dos periodistas rusos durante la guerra en el este de Ucrania y para quien los fiscales piden 23 años de prisión.
"Sávchenko perpetró el asesinato motivada por el odio y la hostilidad hacia la población de la región de Lugansk, y en general hacia todos los rusohablantes", afirmó este lunes Leonid Stepanenko, presidente del tribunal de Donetsk, localidad rusa fronteriza con Ucrania, que vio la causa.
Según el fallo, la piloto proporcionó el 17 de julio de 2014 a las fuerzas ucranianas las coordenadas de un puesto de control de las milicias prorrusas en la región de Lugansk, donde estaban los dos reporteros de la radiotelevisión rusa que resultaron muertos por proyectiles de mortero.
La defensa de la piloto ucraniana mantiene que cuando los proyectiles de mortero mataron a los dos periodistas rusos Sávchenko ya había sido secuestrada por milicianos prorrusos, lo que puede ser comprobada analizando las llamadas en su teléfono móvil, a lo que se ha negado el tribunal.
EEUU, cuyo secretario de Estado, John Kerry, llega mañana a Moscú, y la Unión Europea demandaron ayer la inmediata liberación de Sávchenko, pero el Kremlin rechazó toda injerencia en la labor de la Justicia rusa.
Sávchenko, declarada héroe nacional de su país, fue la primera mujer en graduarse como piloto de las Fuerzas Aéreas de Ucrania, en volar con un bombardero Su-24 y en formar parte de las fuerzas de pacificación desplegadas en Irak (2004-2008).
"No tenéis derecho a juzgarme. Soy un oficial de las Fuerzas Armadas de Ucrania. Tengo todo el derecho a defender mi país y estaba haciendo mi trabajo. No me habéis derrotado y nunca lo lograréis", aseguró en su último alegato.
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