La ciudad fue fundada a orillas del río Volga en 1135. Tiene 12 años más que Moscú e incluso luchó por convertirse en la capital de la antigua Rus. Hoy es un gran centro regional con una población de 414.000 habitantes.
Quienes viajaban entre las dos capitales siempre se alojaban en Tver. La emperatriz Catalina II incluso construyó especialmente en Tver un palacio para el descanso. Hoy alberga la Pinacoteca Regional de Tver. Incluye colecciones de objetos de arte de los gobernadores de Tver procedentes de los nobles estados de la provincia de Tver nacionalizados tras la revolución. Aquí están representadas obras de Alexéi Venetsiánov, Konstantín Korovin, Arkadi Plástov, Valentín Serov, Mijaíl Vrúbel y otros artistas famosos.
La ciudad de Rzhev está situada a 120 kilómetros de Tver. Entre octubre de 1941 y marzo de 1943 tuvieron lugar aquí algunas de las batallas más sangrientas de la Segunda Guerra Mundial, incluida la Batalla de Rzhev (lee más sobre esta batalla aquí). Las tropas soviéticas perdieron aquí más de 1,3 millones de muertos, heridos, desaparecidos y capturados.
En junio de 2020 se inauguró en Rzhev un monumento conmemorativo a los soldados caídos en esta batalla. El centro del monumento constituye una estatua de bronce de 25 metros de un soldado soviético cuya capa “se convierte” en una bandada de grullas. Es una referencia a una de las canciones de guerra más populares y sentidas, Grullas (la letra es de Rasúl Gamzátov y la música es de Yan Frenkel).
Los aficionados a las actividades al aire libre deberían visitar las orillas del Seliguer al menos una vez en la vida. Es un enorme lago (260 km²) de origen glaciar, en el que hay unas 30 especies de peces. Por eso los pescadores vienen aquí en cualquier época del año y pescan desde barcas, desde la orilla y, en invierno, desde agujeros en el hielo.
En las sinuosas orillas del lago hay un gran número de hoteles, campings (y glamping), para que cualquier turista pueda relajarse aquí a su gusto. ¡Y desde la bania (sauna rusa) se puede saltar directamente al lago!
Una de las atracciones de Seliguer es la ciudad de Ostáshkov, la mayor del lago y muy bonita. Entre sus peculiaridades está el Museo Soviético Local, que se encuentra justo en el templo.
Y aquí también se puede dar un paseo en un tren retro en la ruta Seliguer - Ostáshkov - Bologóye.
Uno de los principales puntos de atracción de la región de Tver es el monasterio de Nilo, fundado en el siglo XVI. Este activo monasterio masculino se encuentra también en las pintorescas orillas del lago Seliguer. En la época soviética el monasterio se convirtió en una colonia para delincuentes juveniles, en un campo de prisioneros de guerra y también sirvió como un hospital y un camping...
Según la leyenda, el monje ermitaño Nilo, famoso por su diligente oración, se instaló en la isla de Stolobni, en el lago. Se decía que ni los cataclismos ni los ladrones pudieron desalojarle de la isla. Tras su muerte, otros monjes comenzaron a acudir a su celda y acabaron fundando un monasterio. Antes de la revolución era uno de los monasterios más venerados: miles de peregrinos acudían a venerar las reliquias de San Nilo.
Almuerza un día
En en Torzhok de Pozharski,
Prueba las albóndigas fritas
Y vete ligero.
Este verso fue escrito por Alexánder Pushkin, que viajaba a menudo de San Petersburgo a Moscú para visitar a su amigo Sobolevski. De la mano del principal poeta ruso, las “albóndigas de Pozharski” empanadas en pan blanco rallado se convirtieron en la principal especialidad de la ciudad. Y siguen siendo su tarjeta de visita.
Sin embargo, la ciudad no sólo es famosa por su gastronomía. Lo que una vez fue un importante punto de comercio se ha convertido hoy en una bonita ciudad de provincias con una naturaleza pintoresca en el terraplén del río Tvertsá, el monasterio los Santos Borís y Gleb, que es casi el más antiguo de Rusia (supuestamente fundado en 1038), así como con la singular iglesia Voznesénskaia Vieja de madera del siglo XVII.
Uno de los monumentos más famosos de la región es el campanario inundado de Kaliazin. La torre de 74 metros sobresale del agua no lejos de la orilla. A veces, los turistas que la fotografían ni siquiera se dan cuenta de que las ruinas del que fuera un floreciente monasterio están ocultas bajo el agua.
La mayor parte del monasterio de la Santa Trinidad de Makáriev fue demolida en 1940, y este se quedó inundado durante la construcción de la central hidroeléctrica de Úglich, en el Volga, y el embalse de Úglich. Solo el campanario recientemente restaurado y encalado, así como los frescos que se salvaron milagrosamente del monasterio, recuerdan que antes aquí hubo un convento.
Es difícil imaginar que este manantial y arroyo de las tierras altas de Valdái sea el lugar donde nace uno de los ríos más caudalosos del mundo (y el mayor de Europa). El manantial tiene una capilla y un puente con una placa donde puedes hacerte un selfie memorable.
En Rusia, el río Volga siempre ha tenido un carácter especial: se le llamaba “Madre”, se construyeron muchas ciudades sobre él, alimentaba y alimenta a un gran número de regiones rusas. Por eso desde hace varios siglos se realizan peregrinaciones al lugar de su nacimiento. Ya en el siglo XVII había aquí un monasterio, pero se quemó y no fue restaurado. Y en 1912 se construyó uno nuevo: el monasterio femenino de Olga.
Este lugar a orillas del lago Vselug (ahora forma parte del río Volga) se llama la “Kizhí de Tver”. Al igual que la famosa isla de Kizhí del lago Onega, el pogost de Shirkov atrae por su iglesia de Juan el Bautista, una obra maestra de la arquitectura rusa en madera. Fue erigida en 1697.
Según una de las leyendas, el pogost recibió su nombre en honor de los hermanos Shirkov, comerciantes que construyeron la iglesia. Llevaron dos iconos de Juan el Bautista de Nóvgorod a Moscú. En este lugar pusieron los iconos y decidieron descansar, pero no pudieron levantarlos de nuevo ¡y decidieron construir una iglesia en este lugar, sin un solo clavo!
El nombre de la ciudad procede de la palabra vólok, es decir, un tramo de tierra entre masas de agua por el cual se arrastraban los barcos. De hecho, Vishni Volochok estaba situada en la divisoria de aguas entre la cuenca del Báltico (el río Tsná) y la del Caspio (un afluente del Volga, el río Tvertsá). Bajo el reinado de Pedro el Grande, se construyó el primer canal artificial de Rusia entre estos ríos.
Vishni Volochok siempre ha sido un importante punto de transbordo en el camino de Moscú (y Rusia central) a San Petersburgo. Debido a su conveniente ubicación, aquí había muchas fábricas e industrias, desde fábricas de ropa hasta plantas de vidrio y madera. Y Volochok también es famosa por la producción de válenki (calzado tradicional de fieltro), incluso hay un museo dedicado a este calzado y a la tala manual.
La ciudad conserva muchos edificios de antiguas fábricas, así como casas de ricos comerciantes de diversos estilos. También se construyó aquí el Palacio Imperial donde paraban los emperadores rusos (ha sido reconstruido y hoy alberga una escuela).
Hasta 1929 el pueblo se llamaba Kuznetsovo, y luego fue rebautizado en honor de Porfirio Konakov, participante de la Revolución Rusa de 1905. Este lugar es famoso por su porcelana. La fábrica de loza de Konákovo se fundó en 1809 y es una de las más antiguas de Rusia. Hoy en día ya no está en funcionamiento, pero en su laboratorio de arte los artesanos locales están recreando esta artesanía. Sus productos pueden comprarse como recuerdo de la región de Tver.
Por otro lado, para los turistas modernos este lugar es más conocido como una riviera. Konákovo y la cercana Zavídovo son ahora populares destinos de vacaciones y deportes acuáticos. Aquí pasean en yates, practican wakesurf y wakeboarding, y hay muchos hoteles y campings para pasar las vacaciones. La proximidad de la autopista M-11 hace que este lugar sea aún más atractivo (sobre todo para los moscovitas, que pueden llegar hasta aquí en poco más de una hora).
Síguenos en nuestro canal de Telegram: https://t.me/russiabeyondes
LEE MÁS: Cómo pasar un fin de semana perfecto en Tula
La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: