¿Qué ocurrió en el mar Báltico con el caza Su-24 y el destructor de EE UU?

Los pasados 11 y 12 de abril, bombarderos rusos Su-24 sobrevolaron presuntamente en varias ocasiones el destructor estadounidense USS Donald Cook, que se encontraba realizando unos ejercicios conjuntos con Polonia en aguas neutrales del mar Báltico. La comandancia europea de las fuerzas armadas de EE UU ha expresado una “profunda preocupación” por este motivo, denunciando unas “maniobras aéreas peligrosas y poco profesionales por parte de los aviones rusos”. La Casa Blanca también ha condenado lo sucedido.

No obstante, se sabe que los aviones rusos no llevaban a bordo armamento ni equipos capaces de desactivar los aparatos electrónicos del buque estadounidense. El 13 de abril el Pentágono publicó un video del “agresivo”, según palabras del departamento militar estadounidense, vuelo de los aviones rusos junto al destructor.

Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso ha expresado sorpresa por esta “exagerada reacción de sus socios estadounidenses”, y ha declarado que la tripulación de los aviones rusos estaba realizando vuelos de entrenamiento sobre las aguas neutrales del mar Báltico. El ministerio también subrayaba que el buque estadounidense ese encontraba muy cerca, a solo 70 km, de la base rusa del Báltico, situada en la región de Kaliningrado. Al encontrarse con el barco, los pilotos rusos “dieron la vuelta observando todas las medidas de seguridad”.

¿Por qué se acercaron los Su-24 al buque estadounidense?

Según información oficial, el bombardero ruso se encontraba simplemente realizando un vuelo de entrenamiento. Pero los expertos opinan que el incidente está directamente relacionado con la proximidad del destructor estadounidense respecto a la base militar rusa.

Los marineros utilizan el término “expulsión” para indicar cuando un barco hace retroceder a otro barco hasta que este se encuentre a una distancia de seguridad, según explica el presidente del Centro Internacional de Análisis Geopolítico, el general coronel retirado Leonid Ivashov.

El experto del Centro de Investigación Político-Militar del Instituto de Relaciones Internacionales de Moscú, Mijaíl Alexándrov, señala que los buques rusos no se acercan tanto a las bases estadounidenses situadas a lo largo de la costa de Estados Unidos.

¿Qué habría sucedido el avión ruso hubiera sido derribado?

El Consejo de la Federación, la cámara alta del parlamento ruso, ha declarado que la reacción de Rusia al derribo del avión habría sido “severa”. Según declaraba el miembro del comité para los asuntos internacionales del Consejo de la Federación Ígor Morózov, el destructor estadounidense se encontraba tan cerca de las fronteras rusas que “no habría podido escapar”.

Existen varias opiniones entre los expertos sobre la reacción rusa al derribo del avión.

Según Alexándrov, los militares rusos habrían destruido muy probablemente el destructor como respuesta, aunque el experto no cree que esto pudiera provocar una guerra a gran escala.

¿Qué se proponen discutir Lavrov y Kerry?

Las acciones de los pilotos rusos han sido condenadas no solo por la Casa Blanca, sino también por el Departamento de Estado. “Es una imprudencia. Es una provocación. Es un peligro. Y según nuestras normas de enfrentamiento, [estos aviones] podrían haber sido derribados”, declaraba el secretario de Estado, John Kerry. El portavoz de este departamento, John Kirby, ha declarado que Kerry tratará este incidente con su homólogo ruso, Serguéi Lavrov.

Según Alexándrov, los diplomáticos tratarán seguramente cuestiones de cooperación entre las fuerzas armadas de ambos países, sobre todo teniendo en cuenta que durante la época soviética ya se pactaron varias normas, aunque según el experto Estados Unidos parece haberlo olvidado.

¿De qué “normas de enfrentamiento” habla John Kerry?

Según Ivashov, se trata de unas normas militares internas de Estados Unidos según las cuales, por ejemplo, en 1988 un buque de la Marina de Estados Unidos derribó en el cielo del golfo Pérsico al avión comercial Airbus A300B2-203 con 290 pasajeros a bordo.

“El Pentágono declaró entonces que el avión iraní había sido identificado erróneamente como un caza F-14 de las Fuerzas Armadas. La marina y las fuerzas aéreas no tienen ningún acuerdo que prevea la distancia a la que deben desarrollar sus operaciones militares”, aclara el analista militar.

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