Según el historiador Yuri Galperin, un informe sobre este vuelo único se publicó posteriormente en el número de febrero de 1917 de la revista Vozdujoplávatel, según informaRossíiskaia Gazeta.
Es interesante que los aviadores rusos arriesgaran sus vidas no por vanidad, sino para probar las características tácticas y técnicas de los aviones anfibios de Grigoróvich y para practicar técnicas de combate aéreo. Después de todo, la Primera Guerra Mundial estaba en su auge, destaca el diario ruso.
El “barco volador” M-9 fue creado como explorador marítimo, pero la guerra demostró que el avión anfibio podía ser un destacado bombardero o avión de patrulla. El M-9 era un biplano con un motor de 150 caballos. El fuselaje y los largueros de las alas eran de madera contrachapada, mientras que las alas y la cola eran sólo de lino. El hidroavión tenía una velocidad máxima de vuelo de 110 km/h, una velocidad de aterrizaje de 85 km/h y podía alcanzar una altura de hasta 3.000 m.
El piloto, Yan Nagurski, decidió probar cuánto tiempo podía ganar altura el hidroavión mientras apuntaba verticalmente y después de cuánto tiempo los timones perdían su poder de dirección. Así, el piloto realizó dos ‘bucles’ consecutivos. Durante estas maniobras, Nagurski estuvo a punto de perder a su mecánico, que no estaba atado: Nikolái Godovikov salió volando de su asiento, pero se aferró a las alas del avión.
Fue la primera vez en la historia de la aviación, que un hidroavión hacía una maniobra tan arriesgada como el ‘bucle’.
“Derribado en una de las batallas aéreas sobre el Báltico, cae al mar en un avión en llamas. El informe de la muerte del teniente de Flota Nagurski fue el documento que permitió a los historiadores de la aviación completar la biografía del piloto en 1917. Pero Nagurski no fue asesinado. Herido en combate, fue recogido por un submarino británico”, escribe Yuri Galperin.
Durante la guerra civil rusa, Yan Nagurski regresó a Polonia y se convirtió en ingeniero para la industria azucarera. En 1956 fue invitado por los pilotos de la aviación polar a la Unión Soviética y escribió los libros Primero sobre el Ártico y Sobre el Báltico en llamas. Murió en Varsovia el 9 de junio de 1976.
LEE MÁS: Grigoróvich M-9, el ‘hidroavión zarista’ que fue el primero de su tipo en llevar ametralladoras
La ley de derechos de autor de la Federación de Rusia prohíbe estrictamente copiar completa o parcialmente los materiales de Russia Beyond sin haber obtenido previamente permiso por escrito y sin incluir el link al texto original.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: