Según recuerda el diario Rossíiskaia Gazeta, este avión comenzó a desarrollarse a principios de la década de 2000. El primer prototipo del caza fue creado en 2004. Tenía motores turborreactores de dos circuitos con cámara de poscombustión. Pero un avión tan potente como este necesitaba algo mejor.
El Su-57 recibió un nuevo motor en 2017. Se conoce como “pieza 30” y se diferencia de su predecesor en el aumento del empuje y por tener mayor eficiencia del combustible. El resto de las características se mantienen en secreto.
El Su-57 se distingue de sus “hermanos” extranjeros de quinta generación por el hecho de que combina las funciones de un avión de ataque y un caza interceptor. Su carga de combate es de hasta diez toneladas.
Otra característica peculiar del caza Su-57 es su baja visibilidad. La forma del caza, los materiales utilizados en su construcción y el recubrimiento, que absorbe y refleja radioondas, además de los medios de guerra electrónica, hacen que sea casi invisible.
En 2018 y 2019, el caza Su-57 adquirió experiencia en condiciones de combate real en Siria.
En junio del año pasado Sujói y el Ministerio de Defensa de Rusia firmaron un acuerdo para suministrar 76 cazas de quinta generación. En el Salón Aeroespacial MAKS-2020 se presentó una versión para la exportación.
¡Mira cómo este Su-57 se detiene en pleno vuelo y hace un giro de 360º! (Vídeo).
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