A principios de octubre de 2019, la empresa rusa Lobaev Arms presentó el rifle de francotirador TSVL-8 Stalingrado con cañón acortado en una exposición de armas en Moscú. Está diseñado para operaciones especiales contra terroristas en Siria.
Las fuerzas especiales probaron por primera vez el arma un año antes en ensayos a puerta cerrada en un campo en los suburbios de Moscú. Allí fue puesto a prueba por agentes que regresaban de prestar servicio en Siria, como posible sustituto de los rifles actuales (algunos de los cuales son de fabricación extranjera).
“La tarea era fabricar un arma con munición Lapua Magnum.338 para atacar objetivos a una distancia de 1,5 km. El nuevo rifle debía ser más ligero y más corto que los modelos existentes, porque las armas voluminosas no son buenas para las operaciones de desembarco aéreo o en espacios reducidos”, explicó Yuri Sinichkin, ingeniero jefe de Lobaev Arms, a Russia Beyond.
Los ingenieros decidieron acortar el cañón a 500 mm y reducir la distancia entre las ranuras de estriado dentro del cañón para “girar” la bala de 300 gramos a una velocidad de 1 km/s. El resultado es un rifle de más de 5 kg de peso, capaz de golpear al enemigo a una distancia de casi 2 km.
“El alcance depende de la habilidad del tirador. Por ejemplo, en Chechenia los muchachos batieron un objetivo con un TSVL-8 a una distancia de 1,74 km. Es una cifra bastante buena, dado que el máximo establecido es de 1,5 km”, añadió el ingeniero jefe.
Sin embargo, los diseñadores no ven el TSVL-8 como posible sustituto del obsoleto rifle de francotirador de infantería SVD, que el Ministerio de Defensa ruso planea retirar.
“No es bueno para revolcarse en el barro o para el combate en campo abierto, que son parte de la instrucción de infantería. Es un arma exclusiva para las fuerzas especiales que necesiten eliminar al enemigo en su escondite en cuestión de segundos2, señaló Sinichkin.
Hay planes para suministrar el rifle a los mercados extranjeros, pero Lobaev Arms no ha nombrado a ningún país en particular.
“Podemos entregarlo a clientes privados en cualquier lugar, incluyendo Asia o los países de la OTAN. El papeleo para la exportación desde Rusia es asunto suyo”, afirmó un portavoz de la compañía.
Según los ingenieros de la empresa, en comparación con los rifles de francotirador “europeos” como el Steyr Mannlicher, su producto es inferior en términos de peso. Por otro lado, el TSVL-8 tiene un retroceso mucho más bajo que sus competidores. Además el rifle puede plantar, a una distancia de 100 metros, tres balas a una distancia de 14,5 mm una de otra.
“En comparación, a esa distancia, una Steyr Mannlicher planta tres balas a 35 mm de distancia. En pocas palabras, el radio de disparo [del rifle austriaco] es mayor y, por lo tanto, la probabilidad de que falle es también mayor”, explicó otro ingeniero.
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