La ceremonia del 21 de junio costará cerca de un millón de dólares y se espera la asistencia de Angela Merkel. Fuente: PhotoXpress
Las noches blancas de San Petersburgo permanecerán en la memoria de los invitados al 17º Foro Económico Internacional de San Petersburgo, que tendrá lugar del 20 al 22 de junio, no solo por sus puestas de sol tardías y sus amaneceres tempraneros, sino también por la tradicional hospitalidad rusa.
Como siempre, a los participantes en este acto les esperan vivos debates sobre los más variados temas económicos, sociales y políticos y, además, un cargado programa cultural.
Si todo aquel que lo desee puede contemplar los veleros de la regata corporativa, disfrutar de un concierto de música clásica con la participación de Il Divo acompañado de una orquesta sinfónica en la plaza del Palacio o participar en el concierto benéfico “Estudio de Tsárskoie Seló” en el Palacio de Catalina, solo unos pocos conseguirán acudir a la recepción en nombre del gobernador de San Petersburgo Gueorgui Poltávchenko. Las invitaciones para este acto las reparte el comité organizador del Foro.
Normalmente los participantes en la velada son economistas punteros, políticos líderes y altos cargos públicos –participantes destacados del foro económico–, y está cerrada a la prensa.
Este año se espera que la invitada principal sea la canciller alemana Angela Merkel, invitada personalmente a San Petersburgo por el presidente de Rusia Vladímir Putin durante el consejo interestatal del pasado noviembre en Moscú.
Sin embargo, su presencia en el acto no se confirmará hasta una semana antes del inicio del Foro.
Los invitados del año pasado a la fiesta de gala del gobernador la recuerdan por el espectáculo 'Magia acuática'. Entonces, sobre varios escenarios en medio del canal y bajo velas plateadas bailaban jóvenes 'plateados', varios acróbatas se elevaron al cielo entre chorros de agua para aterrizar sobre camas elásticas flotantes, y el gobernador Gueorgui Poltávchenko llegó en lancha.
También hubo un pequeño escándalo cuando el director del espectáculo propuso maquillar a varios niños imitando estatuas vivas, lo que generó largos debates en la prensa y en blogs.
Por lo demás, durante la inspección iniciada no se observó ninguna violación de los derechos de los niños, y el alboroto alrededor de este incidente se quedó en nada.
“Es una actuación habitual de un grupo infantil. Ha sido una exageración sin fundamento alguno”, comentaba Svetlana Agapítova, Defensora del Menor, las declaraciones del público escandalizado.
Música en vivo y espectáculos
Este año la representación artística principal de la recepción será 'El árbol de la vida', un símbolo de la conexión eterna del ser humano con el mundo que lo rodea. Los invitados serán recibidos por una gran orquesta de jazz compuesta aproximadamente de cien personas.
Los músicos estarán instalados en una flotilla de embarcaciones de pequeño tamaño en una zona delimitada del Málaia Nevká.
Y el regalo especial será la actuación de Ígor Butman, estrella internacional de jazz y artista nacional de Rusia. Los organizadores prometen una jamsession grandiosa con solos y composiciones musicales para orquesta dedicadas a los representantes de los estados participantes en el 17º Foro Económico.
Naturalmente, ninguna recepción puede pasar sin una cena exquisita en cuyo menú se ha trabajado al detalle y casi con tanta meticulosidad como en los escenarios del programa de entretenimiento, dicen.
En palabras de los organizadores, este año los cocineros no van a “escribir con caviar rojo en el negro”, sin embargo a los invitados les esperan suculentos platos.
Con todo, la cuota de gasto por invitado es relativamente baja, unos 3.900 rublos (cerca de 122 dólares).
La empresa Kramer & Co. bajo la dirección del director Víktor Kramer –conocido por el montaje, en colaboración con el artista nacional de Rusia Viacheslav Polunin, de SnowShow– lleva varios años siendo el principal organizador de las recepciones del gobernador durante el Foro.
Kramer también ha participado en la producción de otros 150 espectáculos por todo el mundo, incluyendo el proyecto 'Ballet de oro' en la cena presidencial en honor del tricentenario de San Petersburgo.
En resumen, el objetivo es demostrar a los invitados la irrepetible atmósfera peterburguesa, y es que durante siglos esta ciudad se ha considerado como el centro de todo lo bello y extraordinario à la russe, la quinta esencia de la cultura rusa.
Representar el pasado grandioso a través del prisma actual, mostrar la continuidad de la herencia cultural y las fantásticas posibilidades de su futuro, su valor vanguardista para el país, esa es su tarea nada trivial en el marco de una cena de gala.
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