Desde mediados de noviembre tiene lugar en Rusia una protesta de camioneros. Los trabajadores están en huelga porque el pasado día 15 comenzó a implementarse un sistema de pago por toneladas, que incluye el pago de tasas a los vehículos con la tasa máxima de transporte que excedan las 12 toneladas. Se espera que el dinero recolectado se utilice en la reparación y mantenimiento de la infraestructura de transporte.
Sin embargo, entre los camiones esta tasa ha provocado una condena generalizada, ya que lo consideran una forma “ridícula” de conseguir nuevos ingresos gracias a su trabajo. Ahora, además de los permisos, se ven forzados a pagar extra por las distancias recorridas y el peso de carga, y en caso de que no lo cumplan se enfrentan a multas significativas.
En particular, los camioneros están indignados porque Ígor Rotenberg, una de los empresarios más ricos e influyentes del país, trabajó en la preparación de este polémico proyecto.
La huelga llegó a su punto más conflictivo en Daguestán, región rusa del Cáucaso Norte, cuando un largo convoy formado por camioneros amenazó con dirigirse a Moscú y bloquear el tráfico de la capital si las autoridades no escuchaban sus demandas.
Según informó el periódico de oposición Nóvaya Gazeta desde una de las huelgas de camioneros, estos se quejan de que las autoridades ignoran sus demandas y de que apenas dejan que la prensa informe sobre lo que ocurre.
La mayoría de los camiones de gran carga están registrados en el sur de Rusia, y por eso Daguestán se ha convertido en el centro de las protestas. Después de todo, hay pueblos enteros para los que el transporte de mercancías es una de las fuentes de ingresos más importante.
El político opositor Guennadi Gudkov, escribió en su blog en la radio Eco deMoscú, que apoya las protestas y que considera este sistema un robo que pretende cobrar a los ciudadanos de a pie. Gudkov considera que los rusos deberían estar agradecidos a estos conductores por su valor y su cívica protesta, porque significa que a la sociedad civil todavía le quedan espacios.
La publicación online Gazeta.ru informó acerca de las protestas en diferentes partes de Rusia, aunque son mucho menos intensas que en Daguestán. En la mayoría de los casos, según informa este medio, la policía se dedica a dispersar a los que protestan cuando interfieren en el tráfico.
Este medio también publicó la reacción de las autoridades, que no tienen intención de eliminar la nueva tasa. En los medios de comunicación más afines al Kremlin estos hechos han tenido poca difusión.
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