La Comisión Europea (CE) insistió hoy en que
considerará una exención de las reglas europeas para el gasoducto South
Stream si Rusia lo pide, y apuntó a la reunión del viernes en Berlín
como posible escenario para tratar esta cuestión.
"Si Rusia
pide una exención de la legislación energética existente en la UE,
podemos hablarlo", señaló la portavoz de Energía de la CE, Marlene
Holzner, en la rueda de prensa diaria de esta institución.
Holzner precisó que por el momento no ha habido "ninguna petición
oficial" de Moscú a este respecto, pero aseguró que la UE está lista
para tratar una exención dentro del marco legislativo existente.
La portavoz comunitaria dijo, por otro lado, que nada impide a Moscú
plantear este asunto el próximo viernes si lo desea puesto que, además
de las reuniones a tres bandas con Ucrania que mantendrán ambas partes
sobre la disputa del gas ruso-ucraniana, también habrá contactos
bilaterales.
La UE, Rusia y Ucrania mantendrán un encuentro
trilateral el viernes en Berlín para abordar la cuestión de la seguridad
energética en el contexto del enfrentamiento que mantienen Moscú y Kiev
por ese combustible.
"El objetivo principal del encuentro
será discutir la disputa del gas", precisó Holzner, quien aseguró que la
posición de la CE no ha cambiado, y negó haber hablado de "concesiones"
a Rusia.
"Podemos intercambiar puntos de vista (sobre la
exención) y veremos qué pasa", recalcó, al tiempo que aseguró que esta
posición no es nueva.
El Ejecutivo comunitario considera que
los acuerdos intergubernamentales de los Estados miembros que participan
en South Stream con Rusia no respetan el llamado "tercer paquete
energético", el marco legal comunitario que fuerza la separación
patrimonial de las actividades de producción, transporte y
comercialización de energía, y que Rusia considera lesivo para sus
intereses.
La CE ha tomado diversas medidas para detener la
construcción de South Stream, que pretende traer gas ruso a Europa a
través del Mar negro, en países como Bulgaria porque sospecha que la
empresa creada en este país para desarrollar el proyecto recibió un
contrato de construcción de la infraestructura sin un procedimiento
competitivo y transparente.
South Stream, que empezó a
construirse en diciembre de 2012, se calcula que tendrá un coste total
de 16.000 millones de euros.
La construcción corre a cargo de
empresas mixtas creadas entre la gasística rusa Gazprom, una de las
promotoras del proyecto, y sus socios en Bulgaria, Serbia, Hungría,
Grecia, Croacia, Eslovenia y Austria.
Lea más: La CE rechaza comentar supuesta declaración de Putin de invadir este Europa>>>
Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: