Rusia aseguró hoy que no pidió el
aplazamiento de la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU que debía
abordar el martes la respuesta de la comunidad internacional a la crisis
en Siria.
"Nosotros presentamos la iniciativa de celebrar
dicha reunión, pero la decisión de cancelar la discusión del caso sirio
en el Consejo de Seguridad fue tomada a petición de los miembros del
Consejo", dijo Alexandr Lukashévich, portavoz de la Cancillería rusa,
citado por las agencias locales.
El Consejo de Seguridad
canceló la víspera la reunión extraordinaria de urgencia que tenía
previsto celebrar a puerta cerrada para abordar los últimos
acontecimiento en relación con Siria.
La reunión había sido
convocada por Rusia después de que Reino Unido, EEUU y Francia
anunciaran su intención de presentar una resolución ante el Consejo para
"examinar" la propuesta rusa de que las armas químicas sirias queden
bajo control internacional.
Durante una conversación
telefónica con el ministro de Exteriores de Francia, Laurent Fabius, el
jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, tachó de "inaceptable" la
propuesta de resolución francesa y que está basada en el capítulo 7 de
la Carta de Naciones Unidas, que alude al uso de la fuerza.
La
resolución responsabilizaría abiertamente al régimen sirio de Bachar al
Asad del posible uso de armas químicas contra la población civil, según
denunció la Cancillería rusa.
Por otra parte, Lukashévich
recordó que Lavrov se reunirá con el secretario de Estado
norteamericano, John Kerry, mañana, jueves, en Ginebra, para abordar la
propuesta rusa de control internacional del arsenal químico de Siria.
El ministro de Exteriores de Siria, Walid Muallem, anunció ayer que
su país está dispuesto a suscribir la Convención Internacional para la
Prohibición de Armas Químicas con el fin de renunciar a ese tipo de
armamento, de acuerdo con la propuesta rusa.
Poco antes, el
presidente ruso, Vladímir Putin, había instado a Damasco a suscribir esa
convención, en vigor desde 1997 y que ha sido firmada por 195 países,
incluido Estados Unidos, Rusia e Israel, aunque éste último no la ha
ratificado.
El presidente de EEUU, Barack Obama, pidió ayer al
Congreso que postergara un voto sobre un posible ataque militar contra
Siria mientras se agota una solución diplomática basada en el plan ruso.
Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.
Suscríbete
a nuestro boletín
Recibe en tu buzón las mejores historias de la semana