El presidente ruso, Vladímir Putin, de visita
en las regiones afectadas por las históricas inundaciones en el
Pacífico ruso, anunció hoy que el ministro para el Desarrollo del
Extremo Oriente, Víctor Isháev, dejará todos sus cargos.
El
hasta ahora asesor de Putin y exministro de Recursos Naturales y
Ecología (2004-12), Yuri Trútnev, sustituirá a Isháev como representante
plenipotenciario del presidente para Extremo Oriente, otro cargo que
ocupaba el todavía ministro para este distrito federal del país, toda
vez que la orden de su destitución aún no se ha firmado.
Trútnev, que asumirá además una de las vicepresidencias del Gobierno del
primer ministro Dmitri Medvédev, también se pondrá al frente de una
comisión gubernamental que deberá reparar los daños causados por las
históricas inundaciones que han dejado en la calle a miles de personas
en seis regiones del extremo oriente ruso.
La destitución de
Isháev, sin embargo, no está relacionada con las catastróficas
consecuencias -más de 100.000 personas afectadas y más de un millón de
kilómetros cuadrados en la zona de las inundaciones- que han dejado las
crecidas de los ríos, sin precedentes, y las lluvias de las últimas
semanas, según Putin.
El nuevo hombre fuerte del Kremlin para
uno de los territorios más extensos, aunque también menos desarrollados y
habitados de Rusia, anunció cambios en el trabajo integral de las
instituciones para promover el desarrollo del extremo oriente ruso, una
apuesta personal de Putin desde que volviera a la Presidencia hace poco
más de un año.
Trutnev aseguró a los periodistas que el
ministerio dirigido hasta ahora por Isháev no será liquidado y agregó
que ya "hay candidaturas" para sustituir al exministro.
Subrayó además que el primer objetivo del ministerio es la eliminación
de los daños causados por las inundaciones, que más de u mes después de
su inicio ni siquiera han alcanzado su pico y amenazan con arrasar
nuevas zonas en al menos tres regiones del país -Amur, Jabárovsk y la
Autonomía Hebrea- declaradas en estado de emergencia.
"Después
de esto, tanto yo como el ministerio para el Desarrollo del Extremo
Oriente nos dedicaremos a lo que el propio nombre de la cartera indica, o
sea, el desarrollo de todos los territorios del extremo oriente, la
creación de buenas condiciones de vida para la gente y de condiciones
para la máxima competitividad (económica", dijo.
Mientras, la
crecida del río Amur a su paso por la ciudad de Jabárovsk, con casi
600.000 habitantes, alcanzó hoy un nuevo récord histórico con 7,82
metros, cifra que hace diez días se anunciaba como crítica para iniciar
la evacuación de la capital de la región homónima.
Ahora que
los diques que protegen la urbe se han reforzado en las últimas dos
semanas, las autoridades no plantean de momento la evacuación, aunque
los hidrólogos pronostican que las aguas del Amur, río que sirve de
frontera natural con China, seguirán creciendo hasta llegar a los 8,3
metros.
Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.
Suscríbete
a nuestro boletín
Recibe en tu buzón las mejores historias de la semana