El samoyedo es una raza de perro que toma su nombre del pueblo samoyedo, nativo de Siberia. Estos pastores de renos nómadas crían estos peludos perros blancos para que les ayuden a guiar los rebaños y que tiren de los trineos. Otro nombre para esta raza, especialmente en Europa, es bielkier.
El borzoi ruso parece un lobo por su decisión y su hábito de mantener la cabeza baja. La diferencia entre un sabueso, o cualquier otro perro de caza, y un borzoi es que este último es mucho más rápido y normalmente, también más rápido que su presa. El borzoi da alcance a los animales, mientras que los sabuesos los lleva de lado a lado y los persigue.
El perro ovejero del Cáucaso (conocido como ovcharka) es un perro fuerte, con un cuerpo macizo y musculado y un pelo espeso que lo protege contra las inclemencias del tiempo y los depredadores que amenazan a los rebaños de ovejas.
El terrier ruso negro es una raza creada en las perreras de Krásnaia Zvezdá por orden de Stalin. Es un perro policía para vigilar prisioneros que se adapta a todos los climas.
Esta raza es muy popular en Rusia, donde ha entrado en el imaginario común y ha adquirido el estatus legendario de ser un perro extremadamente inteligente y leal a su dueño.
El husky siberiano es una raza cuyos ancestros proceden del entorno extremadamente frío y hostil del Ártico siberiano. Los huskies siberianos fueron criados por los chukchi de Asia nororiental para llevar pesadas cargas en distancias largas, en condiciones muy duras. Estos perros fueron importados a Alaska durante la Fiebre del Oro y posteriormente se extendió por EE UU y Canadá.
Hay muchos tipos de perros laika en Rusia. Hemos elegido la variedad del este de Siberia. Estos laikas siberianos son cazadores naturales, que se usan para una amplia gama de piezas, desde ardillas y martas o perdices hasta alces, osos, jabalíes o leones de montaña. También pueden utilizarse como perros de trineo.
El miniatura o toy terrier ruso es un perro diminuto que originalmente se cruzó en Rusia a partir del toy terrier inglés. A principios del siglo XX era una raza muy popular, pero se dejó de criar a raíz de la Revolución, ya que normalmente pertenecía a la aristocracia. En los 50, biólogos celulares rusos comenzaron a recuperar de nuevo la raza del miniatura ruso.
Aunque el perro guardián moscovita se parece mucho a un San Bernardo, en realidad esta raza nativa de Rusia combina la belleza e inteligencia del San Bernardo con la versatilidad y arranque del ovcharka caucasiano.
El biólogo soviético Klim Sulímov fue el primero que propuso la idea de cruzar un perro y un chacal a finales de los 80, cuando trabajaba en el Ministerio del Interior. Por tanto, este híbrido se llama a veces perro Sulímov.
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