Tu-214R
Rimma SadykovaLa aparición de este moderno avión de reconocimiento ruso en el conflicto militar en Siria no es casual. La dirección militar rusa necesita urgentemente información de reconocimiento para analizar la situación en la frontera sirio-turca.
El 3 de febrero Turquía denegó a Rusia el permiso para llevar a cabo un vuelo de observación sobre su territorio en el marco del Tratado de Cielos Abiertos. Como respuesta, Rusia ha preparado su “artillería pesada” encarnada en el avión de reconocimiento Tu-214R, capaz de llevar a cabo tareas complejas de reconocimiento sin necesidad de cruzar la frontera entre Siria y Turquía. El avión Tu-214R cuenta con una de las mejores tecnologías para recopilar información de reconocimiento.
La Unión de Fabricantes de Aparatos de Precisión (OAK), fabricante del Tu-214R, no ha revelado a RBTH sus características tácticas y técnicas, debido a que se trata de información altamente secreta, aunque el informe anual del Consorcio Vega (que forma parte de OAK) del año 2014 permite averiguar algunos detalles de este avión.
El Tu-214R se distingue de sus hermanos de la aviación civil por sus extensiones bajo las partes delantera y trasera del fuselaje y a ambos lados del cuerpo, donde lleva instalados potentes radares.
Estos radares sirven de ojos y oídos al avión: los operadores reciben información en modo activo y pasivo (sin desvelar su ubicación), y también son capaces de interceptar las conversaciones por radio del enemigo.
La principal característica de los radares del Tu-214R es una función llamada “radiolocalización subsuperficial”. En otras palabras, el avión es capaz de ver a través de la tierra. Cualquier objeto oculto bajo tierra, cubierto de nieve, arena, oculto entre árboles, puede ser detectado por el Tu-214R. El avión toma muestras de su ubicación y las envía inmediatamente al punto de mando.
Las características radiotécnicas del avión se completan con el sistema de alta definición Fraktsia, gracias al cual la tripulación del Tu-214R obtiene en tiempo real y con gran precisión una imagen del terreno en modo de visión normal y en infrarrojos.
El Tu-214R pasó mucho tiempo en las fábricas y fue objeto de una serie de disputas entre el Ministerio de Defensa y el fabricante debido al continuo aplazamiento del plazo de finalización de su construcción.
El conflicto en Siria puso fin a este largo proceso de construcción y aceleró el desarrollo de este superespía volador. Lo más probable es que la causa de los retrasos fueran no sólo los continuos cambios en la documentación del diseño, sino también la necesidad de poner orden en el sistema de reconocimiento a bordo, cuyas características no acababan de satisfacer a los militares.
En el informe anual de Vega se señala que las características tácticas y técnicas del sistema radiotécnico multifuncional se habían mejorado para lograr un mejor reconocimiento de objetos ocultos y que se había creado una base de imágenes de radiolocalización y un algoritmo especial para procesar, descifrar y transmitir la información directamente desde el avión.
Con este potente equipo, el Tu-214R desempeñará misiones junto con otros aviones de reconocimiento de las Fuerzas Aeroespaciales rusas en Siria: el Il-20 y el A-50. Gracias al Tu-214R, la dirección militar rusa obtendrá importante información sobre la región de forma oportuna y a pesar del cierre del espacio aéreo de Turquía.
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