El Departamento de Estado acaba de publicar su informe anual en el que declara que podría imponer sanciones a Rusia. Fuente: Ria Novosti
En el ministerio señalan que “han leído atentamente el informe del Departamento de Estado de Estados Unidos sobre la trata de personas en el mundo”.
El Ministerio de Asuntos Exteriores ha llegado a la conclusión de que "en lugar del estudio profundo y objetivo de las causas del crecimiento de las dimensiones del tráfico de personas, también en territorio de los Estados Unidos, los autores del informe optan de nuevo por un inaceptable enfoque metodológico que divide a los estados en grupos dependiendo de la simpatía o antipatía política del Departamento de Estado de EE UU".
"En este contexto no sorprende que en el actual informe Rusia se encuentre en la categoría de los 'malvados infractores' (así se llama el tercer grupo), que merecen el castigo de los Estados Unidos en forma de sanciones. Esto se inscribe perfectamente en la lógica de la reciente Ley Magnitski(que impide la entrada en EE UU a funcionarios rusos acusados de infringir los derechos humanos) y otras herramientas democratizadoras que las autoridades estadounidenses intentan utilizar contra Rusia, alegando unas supuestas infracciones en nuestro país en materia de derechos humanos", declaraba Dolgov.
Este señala que los Estados Unidos habían advertido a Rusia en repetidas ocasiones sobre la inminente caída en la clasificación.
"Y para ser merecedores de una valoración positiva del Departamento de Estado de los Estados Unidos nosotros debíamos cumplir con una lista de 'recomendaciones' redactada especialmente para nosotros (el llamado "Plan de acciones para Rusia"), entre las que se nos ordenaba cambiar la legislación y la práctica legal de lucha contra el tráfico de personas siguiendo los patrones estadounidenses”, declaraban representantes del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso.
"Estas exigencias, evidentemente, no eran factibles desde el principio: las autoridades rusas nunca seguirán instrucciones dictadas por otro país en su lucha contra el crimen organizado, que comprende la lucha contra la trata de personas, ni mucho menos cumplirán unas condiciones expuestas en forma de ultimátum", considera Dolgov.
Además, asegura que "esta politización de la cuestión de la lucha contra el tráfico, así como la redacción de un listado de países en base a las simpatías o antipatías políticas o el diseño de listas de 'sancionados', impiden el funcionamiento correcto de las fuerzas del orden en nuestros países, el intercambio de experiencias y la cooperación entre ellos. Sobre todo porque en el informe del Departamento de Estado de los Estados Unidos se mencionan, aunque sea de pasada, ejemplos de los resultados prácticos de esta interacción, como el descubrimiento de una red internacional de criminales dedicados al comercio de personas para su explotación sexual".
"Nosotros hemos expuesto constantemente a nuestros homólogos norteamericanos nuestra disposición a continuar con los contactos constructivos sobre la problemática de la lucha contra la trata de personas, tanto en el plano bilateral como en superficies internacionales, pero sin aleccionar ni denigrar a nadie", señalan representantes del ministerio.
Kerry pide a los países latinoamericanos y Rusia que extraditen a Snowden
Cómo se gestó el proyecto que prohíbe adoptar en Rusia a homosexuales extranjeros
"En lo referente a la posibilidad de aplicación externa de sanciones contra Rusia previstas por la Ley de Protección de Víctimas de la Trata del año 2000, la sola formulación de esta cuestión es indignante. Esto entraría en conflicto con el objetivo de conseguir un futuro desarrollo positivo de las relaciones ruso-estadounidenses, así como con los constructivos acuerdos alcanzados por los presidentes de Rusia y Estados Unidos en su reciente encuentro en Lough Erne. Estos hostiles movimientos irán seguidos, por supuesto, de una respuesta acorde por nuestra parte", concluía el diplomático.
El Departamento de Estado de los Estados Unidos acaba de publicar su informe anual sobre la lucha contra la trata de personas, en el que Rusia, Uzbekistán y China figuran como países infractores de las normas a este respecto.
Estos estados podrían ser objeto de sanciones como el rechazo a la financiación de intercambios educativos culturales o el desacuerdo de Estados Unidos en la recepción de ayuda del FMI o el Banco Mundial.
Las sanciones podrían entrar en vigor el 1 de octubre de 2013 si el presidente de los Estados Unidos no toma la decisión de no llevarlas a cabo, en el caso de que estas no se correspondan con los intereses nacionales de los Estados Unidos.
Artículo publicado originalmente en ruso en Vzgliad.
Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: