El parlamento ruso destaca la importancia de las relaciones con América Latina

Se celebraran en la Duma varias audiencias que destacan las prioridades para establecer un desarrollo en la región. Fuente: RIA Novosti / Alexéi Filippov

Se celebraran en la Duma varias audiencias que destacan las prioridades para establecer un desarrollo en la región. Fuente: RIA Novosti / Alexéi Filippov

El Comité de Asuntos Internacionales de la Duma celebró el lunes varias audiencias parlamentarias para tratar el tema ‘Prioridades en el desarrollo de las relaciones entre Rusia y los Estados de América Latina y el Caribe’.

El primer vicepresidente de la Duma estatal, Iván Mélnikov, señaló durante la inauguración que el acercamiento a los países de América Latina es una de las prioridades de la política exterior de Rusia. “Las últimas audiencias celebradas en el parlamento para tratar este tema tuvieron lugar hace 10 años”, remarcó. “Ahora la situación ha cambiado. El mundo ya no gira alrededor de un único centro; se está formando un escenario multipolar”.

El número de participantes en las audiencias es una muestra evidente del interés que despierta América Latina, tanto en los órganos del poder ejecutivo de Rusia (el Ministerio de Asuntos Exteriores, el Ministerio de Desarrollo Económico y otros organismos), como en las corporaciones estatales, los círculos académicos y la comunidad empresarial. Basta recordar que en los debates derivados de las principales ponencias participaron 35 personas.

Y no es ninguna sorpresa. Por una parte, América Latina dispone de un alto potencial de recursos, lo que, en las condiciones actuales, está adquiriendo cada vez mayor importancia. Por otro, el modelo de desarrollo de algunos países de la región está resultando realmente innovador. Consecuentemente, el PIB total de América Latina ha alcanzado los 3,15 billones de dólares, superando en 2,5 veces el PIB de los países de la ANSA (Asociación de Países del Sudeste Asiático).

El ritmo de crecimiento de la región latina está marcado por la estabilidad, y se calcula que este año constituirá el 4%. “Para muchos socios, todo esto convierte a América Latina en una región prometedora desde el punto de vista de la colaboración comercial e inversionista”, asegura convencido el viceministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Riabkov. “Rusia no debe mantenerse al margen ni dejar pasar esta oportunidad”.

La opinión de que Rusia debe reforzar el diálogo político existente con América Latina para el desarrollo de un sistema de relaciones económico-comerciales fue unánime entre los participantes.

A pesar de la crisis económico-financiera global, los intercambios comerciales de Rusia con la región en cuestión se mantienen en un nivel récord que equivale a 16.200 millones de dólares. En comparación con el año 2005, estos intercambios casi se han triplicado. En palabras del viceministro de Desarrollo Económico, Alexéi Likhachov, ninguna otra región mantiene semejante dinamismo comercial con Rusia. De los 40 países que conforman América Latina, Rusia mantiene relaciones comerciales constantes con 32.

No obstante, los expertos también destacaron que las relaciones económico-comerciales de Rusia con la región siguen experimentando algunas dificultades.

Para empezar, en la mayoría de los países latinoamericanos aún hay un fuerte desconocimiento del sector empresarial ruso y, con frecuencia, la imagen de este deja mucho que desear.

En segundo lugar, los empresarios rusos se enfrentan en la región a la fuerte competencia que representan las empresas chinas y occidentales. Al mismo tiempo, la exportación y la importación están marcadas por un carácter monocultural. La base de los suministros provenientes de la región está conformada por abonos minerales, algunos artículos de tecnología militar, laminados metálicos y equipamiento electrotécnico. Y la importación está constituida principalmente por productos agrícolas.

Por último, se percibe cierta vulnerabilidad en el sistema de intercambios bilaterales, así como en la colaboración en los ámbitos científico e inversionista.

Por otra parte, según el director del Instituto de América Latina, Vladímir Davídov, la colaboración en el ámbito humanitario es “el sector más afectado” y conviene prestarle tanta atención como a la economía.

Tras examinar detalladamente el conjunto de las relaciones entre Rusia y Latinoamérica, los participantes formularon algunas recomendaciones. Concretamente, el Ministerio de Asuntos Exteriores se ha fijado el objetivo de reforzar la asociación estratégica con Brasil (sobre todo en el marco de los BRICS), y también con Argentina, Venezuela, Cuba, México y Nicaragua, tanto en lo respectivo a los asuntos internacionales como en el ámbito de la inversión y la innovación. Es importante establecer fuertes lazos con los grupos regionales de América Latina y avanzar en el diálogo sobre la lucha contra el terrorismo internacional, las ciberamenazas y otros desafíos de la seguridad internacional.

El Ministerio de Desarrollo Económico debería dinamizar su actividad en la línea de cooperación entre el Estado y las entidades privadas a fin de alentar el interés por la región latinoamericana en los círculos empresariales rusos. Debería facilitar la entrada de Rusia en el Banco Interamericano de Desarrollo, de modo que se pueda alcanzar una participación más efectiva y equitativa de las empresas rusas en los proyectos de gran escala planeados para los países de la región.

Al Ministerio de Educación y Ciencia se le ha recomendado la elaboración de un programa de becas para los estudiantes de América Latina que deseen estudiar en las instituciones educativas estatales, que prevea los gastos del viaje a Rusia y la adquisición de un seguro médico a cargo de los presupuestos federales de Rusia.

Es muy probable que el año 2014 sea declarado el año de América Latina en Rusia. Al menos esta es la propuesta formulada por la organización pública ‘Día mundial de la cultura’ que, a propósito, se ha encargado de coordinar el Comité Organizador de las audiencias parlamentarias sobre América Latina.

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