La biblioteca de Putin contiene libros que van desde novelas de Fiódor Dostoievski y Vladímir Nabókov hasta la Etnogénesis y la biosfera de la Tierra de Lev Gumiliov y el Libro de los cambios. El presidente es un gran admirador de poetas rusos, desde Alexánder Pushkin hasta Serguéi Yesenin. Conocedor de la lengua alemana, Putin también aprecia los poemas de Heinrich Heine y Wolfgang Goethe. El presidente afirma que no ha leído ni un solo libro sobre sí mismo porque ya “lo sabe todo”.
Hemos recopilado algunos de los libros sobre los que ha hablado más a menudo y con mayor intensidad.
Durante una ‘línea directa’ con los cuidadnos en junio de 2021, el presidente, enumeró la novela épica sobre la Guerra de 1812 contra la Francia napoleónica entre las obras de ficción que más le influyeron.
Es la historia de un pedazo de masa, que confiaba demasiado en todos los que le rodeaban y acabó siendo devorado por un astuto zorro - otra obra cuya repercusión moral influyó en el presidente ruso. Vladímir Putin aconsejó a todos los altos cargos que se aseguraran de releer el cuento. “En cuanto vosotros, queridos colegas, tomáis los discursos aduladores como pura verdad y os hundís en un estado correspondiente bajo la influencia de lo que os dicen, os arriesgáis a que os coman”, dijo en una ‘línea directa’ en 2021.
En 2016, en una reunión con los ganadores del premio al Maestro del Año, Vladímir Putin admitió que a menudo tiene que leer cosas que no le gustan. Sin embargo, añadió que siempre tiene un libro de Mijaíl Lérmontov en su escritorio para “pensar en algo, distraerse y, en general, meterse en otro mundo, útil, hermoso e interesante”.
En una emisión, Putin llegó a realizar un análisis del poema Adiós, Rusia desatada, citando varios versos. El presidente cree que Lérmontov, que luchó en el ejército en el campo de batalla, era una persona extremadamente valiente: “estaba dispuesto a dar su vida por los intereses de su país y de la Madre Patria”.
En una conferencia de prensa en diciembre de 2020, Putin habló de los libros que lee a sus nietos. Mencionó muchos clásicos rusos y soviéticos y nombró Los doce meses de Samuíl Marshak como uno de sus favoritos. La historia es un cuento con moraleja de una reina niña caprichosa que exige una cesta de campanillas de invierno para ella en vísperas del Año Nuevo a cambio de una recompensa.
Putin leyó el cuento del enigmático niño con gran placer, y en una entrevista llegó a confesar que se lo había aprendido de memoria. Más de una vez, en discursos públicos, ha recordado El principito y ha asistido a obras de teatro basadas en él. En su opinión, el cuento enseña “que somos responsables de los que necesitan ayuda”.
En 2020, mientras discutía sobre cuestiones medioambientales en el Club de Debates Valdái, Putin aconsejó tomar el ejemplo de El principito. “Hay una regla tan firme. Levántate por la mañana, lávate la cara, ponte en orden e inmediatamente ordena el planeta. <...> Es un trabajo muy aburrido, pero no es nada difícil”, citó el presidente.
El autor de Los tres mosqueteros es otro de los autores favoritos de Putin. En una entrevista concedida a la publicación francesa Paris Match en el año 2000, dijo que había leído a Dumas en un momento dado. “Cuando terminé de leer todos los numerosos volúmenes de sus obras, había una especie de vacío, un vacío total. No sabía qué más hacer porque no me interesaba nada en absoluto, excepto leer estos libros”, dijo Putin.
El entrevistador mencionó que Dumas había estado en Rusia y escribió lo siguiente al respecto: “Aquí el presidente o el zar está sentado en el Kremlin. ¿Qué ve desde su ventana? Nada”. Y Putin dijo que estaba absolutamente de acuerdo con el escritor y añadió: “La mayor desgracia -tanto personal como profesional- de estar en altos cargos del gobierno es un grado muy alto de aislamiento”.
En 2011 Putin concedió una larga entrevista a la revista estadounidense de caza y pesca OutdoorLife, en la que dijo que en su juventud le gustaba leer a Jack London, Julio Verne y Ernest Hemingway. “Sus personajes -personas valientes e ingeniosas que viven emocionantes aventuras- ciertamente moldearon tanto mi carácter como mi actitud hacia las actividades al aire libre”.
"Los personajes representados en sus libros, que son personas valientes e ingeniosas que se embarcan en emocionantes aventuras, definitivamente moldearon mi interior y alimentaron mi amor por la vida al aire libre", declaró.
Putin también dijo que entre sus obras favoritas de Hemingway están Adiós a las armas, Por quién doblan las campanas y El viejo y el mar.
En una entrevista con OutdoorLife, Putin recomendó a todo el mundo que leyera “uno de los mejores clásicos rusos”, Iván Turguéniev. Recomendó especialmente Relatos de un cazador, el libro favorito de todos los cazadores rusos, que “refleja la filosofía de la caza en Rusia en su conjunto, donde lo importante no es el resultado, sino el proceso en sí, el hecho de estar cerca de la naturaleza y comunicarse con la gente”, dijo Putin.
En 2007 Vladímir Putin contó en una rueda de prensa cómo afrontaba el mal humor. Su perro Koni y los poemas de Omar Jayam le ayudaron entonces. El presidente dijo que su esposa le había regalado un libro del poeta persa y que “hay muchas cosas interesantes en él que pueden ayudar en estas situaciones”.
Este poeta ruso “campesino” es respetado por Vladímir Putin por su sincero amor a la patria. Mientras hablaba con los periodistas en vísperas de las elecciones de 2012, Putin citó el poema de Yesenin "Gentil, Rusia es mi patria":
Si el ejército celestial grita:
“¡Deja Rusia, vive en el paraíso!”
Diré: “No me hace falta el paraíso, dadme mi patria”.
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