“Uma tiene un documento que dice que no es salvaje”, diceEugenia. “El negocio de los animales exóticos es muy duro, y el 90% de los criadores están vinculados con los cazadores”. Explica que se compró a Uma para salvar al menos una vida, porque viven en una granja en condiciones horribles, encerradas en pequeñas jaulas.
Uma es muy inteligente e incluso entiende algunas órdenes. Le gusta su reflejo en el espejo, incluso ella sabe que es difícil quitar los ojos de algo tan hermoso.
La marta toma todo lo que le gusta, es su instinto natural. Uma con un tomate robado.
“Nuestra relación con Uma en una foto: la marta no está constantemente satisfecha, mientras que yo estoy tratando de convencerme de que es muy agradable (en algún lugar en lo profundo de mi alma). En realidad no me muerde tan fuerte”, escribe Eugenia.
Baile con un pollo.
“La modestia es algo de lo que Umora carece completamente”.
“Después de dos años viviendo juntas se ha vuelto más amigable. Te puede morder en cualquier momento, pero ahora duerme en mis brazos”.
¿Una marta con diamantes? ¿Por qué no?
“Llevé a Uma al bosque. Dijo que estaba sucio, había humedad y era ruidoso. La marta decidió gobernar el mundo desde el balcón. Ve tú mismo al bosque”.
“Los humanos son tan raros: nos acarician, atraviesan nuestros territorios y nos hablan, pero cuando hacemos lo que queremos son infelices. ¡Mi humano no me deja hacer renovaciones en mi casa! Cuando despego el papel de la pared, ella lo pega de nuevo”.
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