Toma una lata y aplástala por los lados: las abolladuras resultantes deben estar casi tocándose para formar un triángulo sin terminar en la parte superior. Entonces comienza el trabajo manual más duro. Empieza a comprimir cada lado haciendo movimientos rápidos. Al comprimir un lado, el otro se descomprime automáticamente. Siga sudando hasta que la lata se rompa por la mitad en las palmas de las manos. ¡Es simple!
No sabías que esto era posible, pero lo es, ¡así que asegúrate de prestar atención! Toma un encendedor y pon a brillar un huevo. Tiene que quedar con un color amarillento brillante. Cubre completamente el huevo con cinta adhesiva. Luego coloca el huevo en unas medias de mujer. Haz nudos firmes a cada lado del huevo para que se sostenga firmemente dentro de las medias. Ahora, dale una vuelta al huevo durante unos minutos. Comprueba si está listo usando tu encendedor, si el huevo está más oscuro de lo que estaba, está listo. Quita las medias, pero guarda la cinta. Ahora hierve el huevo. Colócalo en agua helada cuando esté listo. Retira la cinta. Córtala. ¡Alucina!
Necesitarás contar con una dacha (casa de campo) y una huerta donde cultives verduras. Toma una garrafa de agua de plástico de 5 litros. Pinche la botella en cuatro lugares simétrico en el fondo (no te preocupes, no gotea mucho). Excava una zanja en el centro del huerto, de modo que cada uno de los agujeros se dirija a las raíces de las plantas que crecen en el huerto. La parte superior de la botella debe sobresalir de la superficie, sin embargo, el cuerpo quedar enterrado; recuerde, la tapa debe estar bien cerrada. ¡Y ya está listo el sistema de riego por goteo!
Cuando el autor del vídeo pidió a la audiencia que contribuyera con 50 rublos después de verlo, no podía imaginar que el vídeo recibiría millones de visitas. ¿Será millonario? También nos los preguntamos.
Congelar agua es mucho más popular que hervirla... quizá porque parece un truco de magia que los espectadores pueden usar para impresionar a sus amigos. Toma una botella llena de agua y colócala en un congelador a -19°C. Deja 90 minutos. Luego saca con cuidado la botella del congelador, que todavía no tiene el agua congelada. Llama a tus amigos. Finalmente, levanta lentamente la botella en el aire y golpéela contra la superficie de una mesa con una sacudida brusca. ¡El agua debería congelarse delante de sus ojos! ¡Es mágico!
Tome un viejo y destartalado apartamento soviético, una garrafa de 20 litros, cuatro cubos de levadura prensada y 2 kg de azúcar. Calentar el agua, verter el azúcar en ella, remover hasta que se disuelva, luego verter la masa resultante en una lata. Luego hierves un poco más de agua, añades levadura hasta que se disuelva, la mezclas con el agua con azúcar y sellas la lata... La receta puede ser rara... ¡pero no tan rara como el vídeo mismo!
9 útiles trucos soviéticos para la vida cotidiana con los que te morirás de risa
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