Tras confirmar hoy Vladimir Putin este propósito, se reafirma la idea de acabar con el monopolio de exportación de Gazprom. En una reunión de la Comisión Estatal para la Industria Energética, Putin ordenó al gobierno que estudie la forma de acabar con la posición privilegiada de Gazprom, así como las medidas que permitirán a empresas privadas como Novatek (la cual formuló esta propuesta hace un mes) mejorar el rendimiento y “no perder el mercado ante la competencia”.
En un comunicado aparte, el presidente hizo un llamamiento para acabar con la tradición soviética de clasificar la información relativa a los recursos naturales y las reservas energéticas del país. Este paso forma parte de una campaña más amplia que pretende atraer la inversión internacional y aumentar la transparencia en la economía rusa.
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