La economía rusa a examen

Fuente: Getty Images / Fotobank

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El ex ministro de Finanzas de Rusia, Alekséi Kudrin, cree que la economía rusa necesita profundos cambios y señala la excesiva dependencia de los ingresos procedentes de la venta de petróleo y la baja productividad como algunos de los grandes problemas de la economía rusa.

Para que el modelo actual de crecimiento económico ruso pueda funcionar necesitamos que el precio internacional del petróleo crezca anualmente entre 20 y 30 dólares, declara el ex ministro de finanzas de Rusia Alekséi Kudrin, quien apunta, además, que el gobierno ruso en la actualidad no está trabajando de manera coordinada y, por lo tanto, no es previsible que se produzcan cambios en el curso actual de los acontecimientos.

El ex ministro de Finanzas Alekséi Kudrin ve que los problemas de la economía rusa residen en el modelo económico, que se ha formado sobre la base de los ingresos del petróleo. “Para que el anterior modelo de crecimiento económico ruso pueda funcionar necesitamos que los precios mundiales del petróleo crezcan anualmente entre 20 y 30 dólares”, declara Kudrin a Moskovski Komsomólets. Pero, a su modo de ver, los problemas no se limitan a que el presupuesto se haga a expensas de los petrodólares, sino que también hay otros mucho mayores. “El crecimiento económico en la década de 2000 se basó también en el incremento de la demanda de productos en el mercado interior ruso. ¿Y a qué se debió este incremento de la demanda? En parte, al crecimiento de la extracción de petróleo. Si bien la causa principal no fue el crecimiento de la extracción sino el aumento de los precios del petróleo. Pero cuando estos dejaron de crecer, también se cayó la demanda del mercado interior. En consecuencia se frenó también el crecimiento de la producción. Nuestro modelo económico dejó de funcionar”, dice el experto.

Alekséi Kudrin (1960), es un economista ruso. Ejerció el cargo de ministro de Finanzas entre el 18 mayo del 2000 hasta el 26 de septiembre de 2011.  Destacó por su política fiscal, las reformas presupuestarias y el desarrollo del libre mercado. Durante su mandato Rusia pagó la mayor parte de la deuda externa acumulada durante los años 90. Gracias al Fondo de Estabilización el país pudo superar la crisis de 2008-2009 con solvencia. Dejó el ministerio por discrepancias con Medvédev. Desde que abandonó su puesto ha sido crítico con el gobierno.

Este tipo de crecimiento económico no aumenta la productividad sino que acaba con todos los estímulos para introducir nuevas tecnologías y para hacer crecer la calidad de la producción, explica Kudrin. “¿Le compran la producción de calidad anterior y hecha con el mismo nivel tecnológico? Sí. Por un tiempo se crea la ilusión de que todo va bien. Hay un crecimiento del 7 %. ¿Qué más se puede pedir?”, dice el exministro.

“Más tarde es cuando se cae la venda de los ojos. Basado en el mismo modelo de antes, el crecimiento termina y entonces de repente se hace evidente que se ha entrado en un periodo económico más complejo poseyendo unas tecnologías de producción obsoletas y con instituciones de mercado no desarrolladas. En Rusia hace tiempo que llegó el 'momento de la verdad'. Pero entonces las autoridades se rodearon de asesores que sugirieron: consigamos lo mismo que antes teníamos garantizado con el crecimiento del precio del petróleo mediante el aumento de emisión de moneda. Durante un tiempo el efecto será parecido. No obstante, debido a la falta de instituciones de economía de mercado de pleno derecho en el país, la mitad de esta masa monetaria se irá enseguida en la importación, que resultará más barata que adquirir productos nacionales. Una cuarta parte se irá en la inflación. Y sólo una cuarta parte se destinará al aumento del crecimiento de la producción en el país. El efecto, en conjunto, es negativo”.

 

El ex ministro de Finanzas Alekséi Kudrin. Fuente: Alekséi Filíppov / Ria Novosti

Según Kudrin, el gobierno actual no es propenso a las reformas radicales y “en el último año y medio de nuevo gobierno vemos que se posponen constantemente decisiones clave para el futuro”.

El especialista señala la descoordinación en el trabajo del gabinete de ministros.  “Cada ministro no puede resolver por separado una gran cantidad de problemas. Es necesaria la interacción con otros y con los legisladores. Lo único que puede facilitar esta interacción es un centro efectivo que coordine a modo de presidente del gobierno. En el gabinete de ministros actual no existe prácticamente un centro que coordine. Y, como resultado, cada ministro se queda solo con sus propios problemas. La efectividad del gobierno puede y debe ser mucho más alta que ahora”, dice.

Además, hay otro problema: el alto coste de la mano de obra y su baja productividad. “Para ser económicamente competitivo, el país tiene que reducir los costes de producción. Pero procedemos exactamente al contrario”, se indigna Kudrin. “Incluso en estos meses el crecimiento de los salarios en Rusia ha continuado adelantándose impetuosamente al crecimiento del rendimiento del trabajo. ¡En el último año y medio el gasto en salarios en Rusia ha superado el 50 % del PIB!”.

Según el experto, para la economía de Rusia es vital que se introduzcan masivamente nuevas tecnologías. El 80 % de estas tecnologías, necesarias para Rusia, ya existen en el mundo. El otro 20 % son nuevas tecnologías cuya invención aún está pendiente.

La reducción de las barreras administrativas. “El gasto de defensa, en esencia, sustituye a los otros gastos. Y dado que no es probable que aumente el volumen general de recursos se tiene que elegir entre una cosa u otra”, explica el exministro. “Y esa elección ya está hecha. Conforme a un reciente plan de tres años introducido recientemente por el gobierno, el gasto en formación, sanidad pública e infraestructuras se reducirá en varios porcentajes del PIB. Sí, en números absolutos aumentarán. La economía está creciendo y, en consecuencia, también crecen los desafíos a los que se enfrenta. Y el dinero para afrontar estas tareas es menor”.

Kudrin señala que por ahora no tiene previsto volver al gobierno, dado que se fue por su desacuerdo con el desarrollo de los acontecimientos y en la actualidad la dirección sigue siendo la misma. “Mi vuelta sólo podría estar relacionada con un cambio de política”, declaró.

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