Presente y pasado de las escuelas militares de cadetes

Fuente: photoxpress

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En Rusia, en las escuelas de cadetes, no sólo se valora la calidad de la formación sino también las tradiciones, pero quienes se gradúan en ellas no sólo optan por hacer carrera militar. Los cuerpos de cadetes aparecieron en Rusia en el siglo XVIII, fueron suprimidos después de la Revolución y se restituyeron durante la Segunda Guerra Mundial.

“Mijaíl Stepánovich […] siempre vestía de uniforme, pero de lo más elegante: tocado con el sombrero triangular reglamentario de aquel entonces, iba todo erguido con aire gallardo y tenía unos andares imponentes y majestuosos en los que parecía expresarse el talante de su alma, impregnada por el deber del servicio, pero ajena al miedo del servicio”.

Para los chicos de entre siete y quince años de la época prerrevolucionaria la descripción del personaje de Leskov era un ejemplo a seguir, especialmente para quienes querían hacer carrera militar y por eso ingresaban en academias especiales: los cuerpos de cadetes.  

Imperio y librepensamiento

Las academias de cadetes surgieron en el Imperio ruso, en 1743.  A partir de entonces empezó a ser frecuente ver en las calles de San Petersburgo y de otras ciudades jóvenes engalanados con uniformes militares y sus espadas al cinto. Se les inculcaba la costumbre de ir de punta en blanco a lo largo de todo el periodo de formación, y los estudiantes de último curso participaban en actos en los que pasaba revista el emperador (por cierto, los cadetes actuales, los suvórovtsi, participan en desfiles en la Plaza Roja), por eso el adiestramiento tenía que ser exquisito.

En los cuerpos de cadetes, donde se preparaba a la futura élite del ejército ruso, se prestaba una atención especial a la educación moral.  Además de la instrucción propiamente militar, las bases de la artillería, la ingeniería y el arte de la guerra, los cadetes estudiaban gramática, historia y, de modo obligatorio, bailes de salón.

Se consideraba que un hombre estaba obligado a saber comportarse como es debido no sólo en la guerra, sino también en compañía de damas. Sin embargo, cuanto más amplio es el nivel de formación, mayor es el grado de librepensamiento y más voluble el carácter. Por este motivo, a finales del siglo XIX en muchos cuerpos de cadetes estallaron revueltas, también por motivaciones políticas. Uno de los motivos de expulsión de los estudiantes era “por perversión moral”, como decían entonces.

La URSS y el socorro a los huérfanos

A pesar de que a principios del siglo ΧΧ se produjeron en Rusia muchos acontecimientos que cambiaron el curso de la historia, las escuelas de cadetes fueron reabiertas 27 años después de la revolución de Octubre de 1917, en 1944, un año crucial en la Segunda Guerra Mundial.

Después de la batalla de Kursk en 1943, la Unión Soviética comenzó a recuperar su territorio ocupado y a adoptar medidas para “restablecer la economía en las áreas liberadas”, como se lee en el documento institucional de las academias militares Suvórov.

La apertura de las academias ayudó a resolver una difícil tarea social: según datos oficiales de los investigadores del centro memorial militar de las Fuerzas armadas de la Federación Rusa, la Unión Soviética perdió durante la guerra cerca de 26,6 millones de personas,  en su gran mayoría hombres.

Después de la guerra en el país muchos niños quedaron huérfanos. Estas academias ayudaron, al menos en cierta medida, a compensar la ausencia de la figura paterna, así como a salvar la situación crítica en que se encontraron numerosas familias.

Los suvórovtsi, que eran sobre todo hijos de soldados caídos en el frente durante la guerra, adquirían los conocimientos necesarios para ingresar en centros de enseñanza superiores y licenciarse en especialidades importantes. Además, si en el Imperio ruso hubo unas 20 academias, en la URSS fueron 50.

La popularidad de las academias

La formación en las escuelas de cadetes se consideraba y se sigue considerando hoy elitista.   En 2014, las academias militares Suvórov conmemoraron su 70º aniversario, pero los profesores en realidad no cuentan desde 1943: “La preparación de los suvórovtsi se realiza teniendo en cuenta las mejores tradiciones del cuerpo de cadetes de la Rusia prerrevolucionaria”, dice el director de la academia militar Suvórov de Moscú, el general Alexander Kasiánov.

Durante los 70 años de existencia de las academias Suvórov, sólo en la de Moscú se han formado más de 12.000 estudiantes, de los cuales cuarenta han llegado a ostentar el rango de generales y ocho fueron distinguidos como héroes de la Unión Soviética y Rusia.

Pero no todos optaron por hacer una carrera militar: más de 300 alumnos de la academia militar Suvórov de Moscú han sido doctores y doctorandos de ciencias, académicos, profesores y médicos.

También hay quienes eligieron otros ámbitos profesionales. Por ejemplo, fueron suvórovtsi el ex ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Ígor Ivánov, y el músico, productor y director Stas Namin, creador de grupos del culto en Rusia como Park Gorkogoo Splin, etc.

Gracias al alto nivel de formación que brindan las academias Suvórov ahora gozan de una gran popularidad. El Ministerio de Defensa tiene previsto abrir nuevas academias y en muchas escuelas de todo el país se ofrecen cursos para cadetes.

“Nuestro programa está concebido de modo que los chicos no sólo se dedican a su preparación física y a estudiar las asignaturas del programa. Se concede mucha atención a su educación moral y a las habilidades para saber comportarse en sociedad. En el programa educativo se incluyen los bailes de salón y rudimentos de protocolo”, explica a RBTH el psicólogo de uno de las academias militares Suvórov.

El baile de cadetes

Es uno de los acontecimientos más importantes del año.  A pesar de que las academias ahora cuentan con autorización oficial para admitir a chicas, hay muy pocas, y lo más frecuente es que no haya ninguna. Por eso, en el baile de cadetes los jóvenes tienen una oportunidad irrepetible para conquistar a bellas señoritas con sus dotes de bailarines.

En 2013 estuvieron invitados al baile internacional de cadetes los actores de la serie televisiva rusa Kadetstvo, que se rodó en la academia militar Suvórov de Tver.  La saga narra la historia de los cadetes y en ella se refleja cómo se desarrolla el día a día en el seno de una de estas academias: el toque de corneta a las siete de la mañana, el entrenamiento, las relaciones con los amigos, pero el tema principal son los amoríos entre los futuros oficiales y las chicas. Como en la vida misma.  

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