Los que perpetraron el atentado abogan por cambiar a fuerza el sistema político en el país, añade la nota.
"Expresamos nuestras profundas condolencias a los familiares de los perecidos", apuntó el ministerio, que precisó al mismo tiempo que no hubo ciudadanos rusos entre los muertos.
Nueve personas murieron y más de un centenar resultaron heridas por las explosiones de dos coches bomba conducidos por suicidas en la ciudad norteña de Idleb.
Los sucesos tuvieron lugar un día después de la llegada a Damasco del nuevo jefe de la misión de supervisión de la ONU en Siria (UNSMIS), el general noruego Robert Mood, para verificar el cumplimiento del plan de paz en el país árabe. EFE
Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: