Gracias a su atractivo visual, el motocross empezó a ganar popularidad rápidamente en el mundo entero, incluida la Unión Soviética. El motocross se desarrolló activamente en el país a partir de 1928 y el equipo de la URSS ganó en varias ocasiones los premios más importantes de los campeonatos internacionales, por ejemplo, el del "Motocross de las naciones".
Fotos de Anisia Boroznova
Desgraciadamente, con la caída de la URSS y el cese de la financiación la tradición soviética de motocross acabó desapareciendo. Los deportistas tuvieron que autofinanciarse y no todo el mundo tenía la capacidad de hacerlo. En un año un deportista profesional utiliza dos o tres motos. Además, se necesita dinero para la equipación del piloto, los viajes a las competiciones, la gasolina, las piezas de recambio, las cubiertas, etc.
En Occidente se ha creado toda una industria alrededor del motocross. Y es que no es sólo un deporte, sino también un espectáculo inolvidable, con altas velocidades, saltos y una lucha encarnecida… Las competiciones son seguidas por decenas de miles de espectadores, se publican enormes tiradas de revistas y libros especializados y se hacen películas.
Claro que a Rusia le queda todavía mucho para llegar a una situación parecida. Sin embargo, en los últimos años se observa una dinámica positiva en este deporte. Están apareciendo equipos de corredores profesionales con patrocinadores oficiales. El nivel de la nueva generación de pilotos rusos ha aumentado mucho. Es posible que dentro de poco, en Rusia, el motocross goce de la misma popularidad que en otros países.
Fotos de Anisia Boroznova
El final de la temporada 2010 ha traído dos sorpresas agradables para los amantes del motocross en Rusia. La primera ha sido la etapa final de la Copa XSR-MOTO.RU de Country Cross 2010, que se llevó a cabo adoptando el formato de una carrera de playa en la Región de Krasnodar. El recorrido de 4 kilómetros de longitud, fue organizado en una franja de arena a lo largo del Mar Negro. Previamente, en la playa, se habían llenado 15 camiones con la basura resultante de una tormenta que había tenido lugar la semana anterior a la celebración del campeonato.
El segundo recorrido, poco habitual para los participantes rusos, fue organizado en la ciudad de Zheleznodorozhny (región de Moscú), siendo la etapa final de la serie IRONMAN 2010. En un campo absolutamente llano y libre de obstáculos, en tan sólo unos días aparecieron trampolines artificiales, troncos caídos, obstáculos hechos con carrocerías de coches y montículos de arena. Los organizadores califican sus esfuerzos como un intento de introducir en las carreras elementos del supercross.
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