En busca de la evolución de los virus en los restos de un caballo de 4.500 años

Nina Sleptsova/Universidad Federal del Nordeste en Yakutsk
En los estos sorprendentemente bien conservados de animales milenarios, desenterrados en la remota región de Yakutia, un grupo de científicos busca desentrañar la historia de los virus e iniciar el desarrollo de la paleovirología en Rusia.

Los descubrimientos de los animales extintos tienen un valor universal excepcional y su análisis en laboratorio "contribuirá a las ciencias de desarrollo intensivo: la paleomicrobiología y la paleovirología", considera el organismo de control sanitario de Rusia.

El estudio piloto se está llevando a cabo en el marco de un acuerdo de cooperación entre la Universidad Federal del Extremo Oriente de Yakutia y el Centro Estatal de Investigación Vectorial de Virología y Biotecnología, con sede en Siberia (que creó una de las vacunas rusas contra el coronavirus, denominada EpiVacCorona). 

El reto consiste en "buscar nuevos microorganismos desconocidos y estudiar la evolución de bacterias y virus ya conocidos", explicó el organismo de control sanitario ruso Rospotrebnadzor en un comunicado compartido con Russia Beyond.

Los científicos han comenzado su investigación analizando los restos del caballo de Verjoyansk, que vivió hace unos 4.450 años y fue descubierto en 2009 en el noreste de Yakutia. El animal, que vive hasta hoy, es conocido desde hace tiempo por estar bien adaptado al clima extremadamente frío del Extremo Oriente ruso. Pasa todo su tiempo en el exterior, sin que le molesten las heladas de -60 °C o el calor de +40 °C; de hecho, cualquier tiempo no es un problema.

“Es gracias a las condiciones climáticas y geográficas únicas que los microorganismos han sobrevivido en el permafrost de la República de Saja (Yakutia). El estudio en curso ayudará a obtener más información sobre la estructura de su genoma, a rastrear su evolución y a predecir posibles opciones para cambiar sus propiedades biológicas”, señala el comunicado.

El análisis del material biológico del caballo de Verjoyansk ocupa el primer lugar de la lista, ya que el genoma de este antiguo animal ha sido completamente descifrado. Los investigadores estudiarán una muestra del tejido blando del caballo detalladamente, para sacar a la luz todo tipo de microorganismos y especies de bacterias que lo habitan y rastrear los cambios en su genoma.

En busca de paleovirus

Los cadáveres de animales prehistóricos, descubiertos en el permafrost de Yakutia, se conservan en el Museo del Mamut. Más de 20 especies de animales antiguos se han conservado cuidadosamente en un congelador especial a temperaturas de -18°C. Casi todos los representantes de la megafauna (grandes animales) del periodo cuaternario (el más reciente de los tres periodos de la Era Cenozoica) fueron descubiertos por expertos del Museo del Mamut.

Se pondrán bajo el microscopio varios animales de la megafauna, entre ellos los restos de un mamut extinto, un caballo, un bisonte, un alce, así como perros, varios roedores y liebres.

“Son hallazgos que se han hecho en los últimos diez años. Por primera vez se examinarán para detectar la presencia de paleovirus”, afirma Maksim Cheprasov, jefe del laboratorio del Museo del Mamut de Yakytsk.

El análisis del material biológico de los antiguos animales permitirá a los científicos evaluar a fondo la diversidad de microorganismos, cuyo ADN y ARN han resistido literalmente la prueba del tiempo y se han conservado bien. Los investigadores están decididos a descubrir los paleovirus para realizar investigaciones de vanguardia en el campo de la evolución genética de los virus. Esto es lo que realmente es la paleovirología, el estudio de los virus antiguos (los llamados "paleovirus") y su impacto en los genomas de los huéspedes. Los científicos están dispuestos a utilizar nuevas ideas y tecnologías para arrojar nueva luz sobre los paleovirus.

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