El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, llamó hoy a cumplir rigurosamente los acuerdos de alto el fuego en Nagorno Karabaj, en una reunión en Ereván con su homólogo armenio, Eduard Nalbandián.
"Hoy lo importante es cumplir rigurosamente los acuerdos de alto el fuego e impedir nuevas violaciones a los acuerdos de 1994, que establecieron un régimen de cese indefinido de la hostilidades", dijo Lavrov en la capital armenia, según la agencia oficial rusa RIA Nóvosti.
El canciller ruso subrayó que su país está dispuesto a "hacer todo lo posible" por lograr un arreglo político al conflicto de Nagorno Karabaj, que estalló a fines de los pasados años 80 entre Armenia y Azerbaiyán, cuando ambas repúblicas formaban parte de la Unión Soviética.
El pasado día 2 el conflicto armenio-azerbaiyano se reactivó con inusitada violencia y en cuatro días de combates murieron al menos unos 140 militares, según los partes de ambos bandos,
Tras acordar, con mediación de Rusia, un cese de las hostilidades las partes en conflicto abrieron negociaciones para la firma de un documento que restablezca el alto el fuego que entró en vigor en 1994 y que puso fin a una guerra que dejó más de 25.000 muertos.
Los armenios de Nagorno Karabaj aseguran que los combates no han alteraron la situación en el frente, pero el presidente azerbaiyano, Ilham Alíev, aseguró que su Ejército "había puesto al enemigo en su lugar y a día de hoy cuenta con una clara superioridad".
Se refería a los puntos estratégicos que las unidades militares azerbaiyanas retomaron y que representan el mayor éxito militar para Azerbaiyán en más de dos décadas y que Bakú se niega a devolver.
El líder azerbaiyano ha dejado claro que considera inaceptable mantener el actual statu quo, en el que las tropas armenias controlan, además del propio enclave de Nagorno Karabaj, una franja de seguridad que representa un 20 % del territorio de Azerbaiyán.
"La aventura azerbaiyana ha asestado un duro golpe al proceso negociador", dijo el ministro de Exteriores armenio en su reunión de hoy con Lavrov.
Nalbandián indicó que Armenia, con la ayuda de Rusia y otros países, "intenta superar los obstáculos que Bakú permanente pone al proceso de negociaciones".
"Somos unánimes en que el uso de la fuerza es inadmisible y en que no hay alternativa a un arreglo negociado de conflicto", recalcó.
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