El presidente ruso, Vladímir Putin, se
encuentra bien de salud, pese a la repentina cancelación de la visita
prevista para mañana a la centroasiática Kazajistán, según informó hoy
el Kremlin.
"El presidente se encuentra bien", dijo Dmitri Peskov, portavoz del Kremlin, a la agencia Interfax.
Peskov subrayó que la cumbre en Astaná, capital kazaja, con los
presidentes de Kazajistán y Bielorrusia, integrantes junto a Rusia de la
Unión Eurasiática, "se celebrará dentro de varios días por decisión de
los tres líderes".
De esa forma, negó las informaciones de la
prensa, que cita a fuentes oficiales kazajas, de que el jefe del
Kremlin, de 62 años, haya caído enfermo.
En los últimos meses,
Peskov ha tenido que salir al paso en diversas ocasiones a los rumores
sobre los supuestos problemas de salud del líder ruso.
Algunos
medios incluso afirmaron de que el líder ruso sufre cáncer, otros,
problemas de espina dorsal y hasta de páncreas, e incluso vincularon esa
enfermedad con su decisión de anexionar la península Crimea e
intervenir en la vecina Ucrania.
El Kremlin sólo ha reconocido
que Putin arrastra varias lesiones deportivas, declaraciones que
llevaron a la prensa rusa a afirmar que la salud del presidente había
dejado de ser un secreto de Estado.
Mientras, Putin acusó a la
oposición de "poner en duda la legitimidad y la capacidad de trabajo de
las autoridades" al propagar esos rumores.
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