El sorteo preliminar para el Mundial de
fútbol de Rusia se celebrará el 25 de julio de 2015 en el Palacio de
Constantino, conocida como la residencia de verano del presidente ruso,
Vladímir Putin, a las afueras de San Petersburgo.
"Estamos muy
contentos de que la FIFA apoyara la idea de celebrar el sorteo
preliminar en el Palacio de Constantino (...), un grandioso monumento
del siglo XVIII", aseguró hoy Vitali Mutkó, ministro de Deportes de
Rusia.
En ese sorteo se formarán los grupos de la fase de
clasificación para el Mundial de Rusia, el primero que se celebrará en
Europa del Este.
El comité organizador y la FIFA confirmaron
que el Mundial se celebrará en doce estadios, que la final se disputará
en el estadio olímpico Luzhnikí, que también acogerá una semifinal,
mientras la otra se jugará en San Petersburgo.
Además, Mutkó
adelantó que, previsiblemente, el partido por el tercer y cuarto puesto
se disputará en Sochi, según informaron medios locales.
"Partimos de que cada ciudad albergará cuatro partidos", dijo Mutkó,
quien descartó problemas de comunicaciones debido a las grandes
distancias entre las ciudades sede en la parte europea de Rusia.
En particular, destacó que en dos o tres horas de vuelo el aficionado
podrá desplazarse desde Sochi (mar Negro) a San Petersburgo (mar
Báltico) o Yekaterimburgo (Urales).
Recientemente, el
Ministerio de Transportes adelantó que los aficionados podrán viajar
gratis en tren durante el Mundial con sólo presentar la entrada para el
partido correspondiente.
Precisamente, Siberia fue descartada
por ese motivo, además de por los diferentes husos horarios, mientras el
Cáucaso, donde el fútbol es muy popular, fue excluida por razones de
seguridad.
Por el momento, únicamente dos estadios
mundialistas, el de Kazán y del Spartak Moscú, han sido inaugurados, ya
que el del Fisht, que acogió en febrero la ceremonia de apertura y
clausura de los Juegos de Invierno de Sochi, serán remodelado
parcialmente con vistas a 2016.
El secretario general de la
FIFA, Jérôme Valcke, llamó hoy a no politizar el Mundial de fútbol de
Rusia y tachó de "sinsentido" las amenazas de boicotear el torneo.
"Creo que todos entenderán que el Campeonato del Mundo no tiene nada
que ver con la política y que no hay que utilizarlo como instrumento
político (...) Es una fiesta para los aficionados", dijo Balcke a la
prensa rusa.
A finales de octubre el presidente ruso, Vladímir
Putin, y su homólogo de la FIFA, Joseph Blatter, inspeccionaron las
obras de reconstrucción del Luzhnikí, antiguo estadio Lenin.
Lea más: ¿Cuáles son los principales retos de Rusia para el Mundial de 2018? >>>
Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: