Perú es uno de los principales clientes de Helicópteros de Rusia en Sudamérica. En la época de la URSS, cuando entre los países ya existía una activa cooperación militar, se empezaron a vender helicópteros Mi-8/17 y Mi-25. Algunos de ellos siguen prestando servicio en la actualidad. Tras una larga interrupción durante la segunda mitad de la década de los 2000, Rusia ha reanudado los envíos de helicópteros al país andino.
En 2010 Perú compró a Rusia seis helicópteros Mi-171Sh. Los aparatos llegaron en 2011 y desde 2012 han participado activamente en operaciones antiterroristas. Los helicópteros rusos han ayudado a los militares a llegar rápida y eficazmente a sus destinos y, en caso de necesidad, han prestado cobertura de fuego a las tropas terrestres. El Mi-171Sh, así como el Mi-25 y el Mi-35, que ya prestan servicio, han transportado a las fuerzas gubernamentales hasta lugares de difícil acceso en la zona del valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro, lo más cerca posible del lugar en el que se ocultaban las organizaciones criminales. La participación de los helicópteros rusos ha sido clave en operaciones de liquidación de narcotraficantes y terroristas ocultos en lugares recónditos de la selva del Amazonas.
A finales de 2013 Perú y Rusia firmaron un contrato para la venta de 24 unidades de estos helicópteros, que seejecutó a principios de 2016.
Los aparatos necesitan inspecciones regulares y reformas. Además, el cliente debe tener acceso a piezas de repuesto para que sus ingenieros cualificados puedan sustituirlas.
Perú, que cuenta con un imponente parque de helicópteros rusos, también necesita tener cerca un servicio postventa para mantener sus aparatos en buen estado. Anteriormente el servicio técnico de s no era lo suficientemente eficaz debido a complejos problemas logísticos, ya que cada uno de los vehículos debía trasladarse en aviones de transporte Ruslán desde Lima hasta las fábricas de reparación en Rusia. Una vez reparados, se repetía el traslado en la otra dirección. Además, las piezas de repuesto tardaban varios meses en llegar, lo que amenazaba con convertirse en un problema.
Sin embargo, en 2014, cuando Helicópteros de Rusia obtuvo permiso para vender piezas de repuesto, componentes y documentación técnica a sus clientes y a ofrecer el servicio técnico, la reparación y la modernización de los helicópteros la situación en el ámbito del servicio postventa cambió radicalmente. Otro servicio importante fue la posibilidad de formar a especialistas extranjeros.
En septiembre el holding ganó un concurso para la venta de piezas de repuesto para helicópteros Mi-8/17 a las Fuerzas Aéreas de Perú. Esta victoria iba precedida de otro concurso ganado por la empresa para la venta de repuestos de helicópteros Mi-35. Tras la firma de los contratos correspondientes, Perú comenzará a recibir las piezas directamente del fabricante a principios de 2017. Según algunos expertos, esto contribuirá a hacer frente a los componentes falsificados, que hasta ahora solían comprarse prácticamente en mano y ponían en peligro la seguridad en los vuelos y la vida de los miembros de la tripulación.
El servicio postventa no se limita al envío de piezas de repuesto y a la reparación de los helicópteros. Incluye también la formación de personal de vuelo y de ingeniería. Por ahora los especialistas peruanos aprenden a pilotar helicópteros rusos en Ulán-Udé, donde existe un centro de entrenamiento de aviación y a reparar los helicópteros en Novosibirsk, en una de las fábricas del consorcio Helicópteros de Rusia. Todo esto, naturalmente, no descarta la formación en su propio país, y los especialistas rusos ya comienzan a desplazarse a los países que compran helicópteros para ayudar a sus socios extranjeros a manejar la nueva técnica in situ.
Una de las pruebas de la importancia del mercado peruano para Helicópteros de Rusia son las intenciones de la empresa de construir y equipar un centro de entrenamiento de helicópteros para las tropas terrestres de Perú. La creación de este centro, de entrenamiento comenzará próximamente cerca de Lima y reducirá considerablemente el tiempo de formación. Los representantes de la empresa planean finalizar las obras de construcción en 2017.
“El mercado peruano es extremadamente atractivo para nosotros. Para poder reforzar nuestras posiciones en este mercado financiamos por iniciativa propia la costosa construcción de un centro de entrenamiento de pilotaje de helicópteros, que ofrece a nuestros socios mayores posibilidades para la formación de su personal en un tiempo más corto”, comenta el director general adjunto de servicio postventa de Helicópteros de Rusia, Ígor Chechikov.
Si tenemos en cuenta las grandes dimensiones del parque de helicópteros rusos en Perú para poder llevar a cabo unas tareas de reparación eficaces los centros de servicio podrían ser necesarios en cualquier punto del país. Esto es especialmente importante en las zonas más desapacibles, como el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro, donde los aparatos que vuelan sobre la selva sufren constantemente el peligro de recibir disparos desde tierra.
“Para estas situaciones tenemos un centro de servicio técnico móvil que permite llevar a cabo una reparación operativa de helicópteros en zonas alejadas de su base. El centro está formado por dos hangares neumáticos- donde se colocan los helicópteros durante los trabajos de reparación- varios módulos para los medios de reparación terrestre, maquinaria y medios de control y verificación, así como otras herramientas necesarias. Además, este complejo incluye módulos adicionales para ubicar hasta 30 miembros del personal técnico del cliente”, –comenta Ígor Chechikov-. En general, podemos ofrecer cualquier tipo de solución para prestar un servicio técnico eficaz a nuestros helicópteros. En estos momentos hemos constatado un avance en el mercado del servicio técnico para helicópteros en Perú y no pensamos detenernos ahí”.
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