Vladímir Medinski y Cristina Fernández de Kirchner. Fuente: Viacheslav Prokofiev/TASS
El Año Dual se inauguró con la exposición “Eva Perón: Embajadora de la paz”, que también incluía una muestra de pinturas de la artista argentina Marina Olmi “El humor alarga la mirada de la inteligencia”.
La exposición fue organizada por el Museo Estatal de Historia junto con el museo de Eva Perón de Buenos Aires. Los cuadros de Olmi describen a Evita en un ambiente cotidiano – aparece sonriendo, cocinando y hablando por teléfono. En la propia exposición se crea la imagen de Eva en todas las dimensiones – están recolectados sus vestidos y zapatos originales junto con las publicaciones dedicadas a ella en las revistas, los regalos que hizo a los niños a través de su fundación de caridad y no deja de sonar su voz – en la pantalla se proyecta un documental, que incluye sus discursos.
El ministro de cultura resaltó la importancia del evento argentino para el intercambio cultural. “Eva Perón ocupa un lugar especial en la cultura rusa y también en nuestra vida...Cada ruso que se interese por la cultura puede cantar el motivo de Don´t cry for me Argentina”, dijo Vladímir Medinski. “La idea de la tercera vía es muy cercana a Rusia”, agregó el ministro.
La presidenta agradeció al gobierno y al pueblo ruso la cálida bienvenida y destacó un momento curioso que conocía de la muestra: “Los obreros que montaban la exposición paraban para escuchar la voz de Evita. Hasta hoy en día sigue imponiendo esta fascinación”. Subrayó que Eva Perón es un gran ejemplo del triunfo de la mujer que no había olvidado su belleza: “Ella no creía que la belleza era incompatible con la revolución”, aseguró Cristina Fernández.
“Espero que esta exposición permita a los rusos no solamente conocerla, sino también amarla”, agregó. También expresó sus felicitaciones con el aniversario de 70 años de la victoria en la Segunda Guerra Mundial y el cumpleaños de Vladímir Lenin, que se festeja el día de la apertura. “Fue un líder que hizo la historia de todo el siglo XX”, afirmó la presidenta.
En honor a la exposición la presidenta traía una rosa en su vestido, igual a la que solía usar Eva Perón. Esta réplica fue creada especialmente por los jóvenes rusos y regalada a la mandataria. “Pero no vayan a titular que me puse esta flor para parecer Evita”, agregó Cristina Fernández irónicamente.
El día del evento continuó con una degustación de vinos Malbec y más tarde con la muestra del películas argentinas en el cine “35 mm”.
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