Según explicó Amira Valieva, México ha comprado cinco aviones no tripulados a Rusia. Se espera que el suministro de los dos primeros aparatos tenga lugar en septiembre de este año. "También está planeada la llegada de especialistas desarrolladores de la compañía a México para la formación de técnicos y para el mantenimiento de los aviones no tripulados", explicó Valieva a la agencia Interfax.
En la página de los productores Ptero G0 se explica que los drones están especializados en fotografía aérea, tienen un motor de gasolina y son capaces de transportar una carga útil de hasta 5 kg. Pueden mantenerse en el aire con una carga de 2 kg durante ocho horas y en este tiempo pueden recorrer hasta 800 km.
El aparato ejecuta el vuelo según órdenes del operador y también puede realizar la misión de manera automática, según un viaje establecido de antemano gracias al sistema de control automático, desarrollado completamente por PteRoBot.
El avión no tripulado se lanza con la ayuda de una catapulta neumática. El aterrizaje se realiza según indicaciones de un piloto externo o mediante la ayuda de un paracaídas que utiliza una almohada para amortiguar en un lugar abierto y sin planear. Según fuentes abiertas, el precio de un aparato de PteroG0 es de cerca de 75.000 dólares.
Las exportaciones de Ptero G0 a México pueden considerarse la primera experiencia con éxito de exportación de los drones rusos a América Latina. En mayo de 2012 Venezuela probaba los drones Rubezh-2 y Rubezh-10, fabricados por la empresa Aerokon de Kazán. Sin embargo, no ha trascendido la información sobre estas ventas de drones rusos a la república bolivariana, aunque la necesidad de estos aparatos se estimaba en alrededor de varias decenas, según los expertos venezolanos.
“México es el mercado con más posibilidades para la venta de drones en América Latina”, opina Mario Aurelio González, director de la empresa distribuidora HeliBoss Latinoamérica. Según él, los principales compradores de drones son empresas que se dedican a fotografía aérea: universidades e institutos de investigación, organizaciones gubernamentales y medios de comunicación. El nombre de la empresa que adquiere los productos de Ptero G0 todavía no se ha dado a conocer.
A finales de agosto se dió a conocer que la Armada de México gastará 4,3 millones de dólares en la adquisición de drones de alta tecnología para observar la costa del océano al suroeste del país. Precisamente allí ponen huevos las tortugas golfinas que están en peligro de extinción. A menudo se saquean los lugares donde desovan. El problema ha adquirido tal escala que actualmente incluso las Fuerzas Armadas de México se han sumado a buscar una solución.
Según información de la parte mexicana, con el dinero asignado se podrán comprar entre tres y cuatro complejos de drones de última generación que buscarán a los delincuentes que saquean las puestas de huevos de las tortugas.
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Artículo publicado originalmente en ruso en Mir-Robotov.
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