Los cinco escándalos más sonados del artista ruso Piotr Pavlenski

Los titulares del tipo “Piotr Pavlenski se corta el lóbulo de la oreja” han inundado la red rusa. El artista ya se ha expuesto anteriormente a tormentos físicos. Según sus propias declaraciones, posee un umbral del dolor bajo y acude a estos métodos para expresar sus opiniones políticas.

“Separación”

Pavlenski se cortó la oreja con un largo cuchillo mientras permanecía sentado y desnudo en el borde del tejado del centro de psiquiatría social y judicial Serbski de Moscú.

“El cuchillo separa el lóbulo de la oreja del cuerpo. La pared de hormigón de la sección de psiquiatría separa la sociedad de los enfermos entre cuerdos y dementes”, así comienza el manifiesto del artista publicado en la página deFacebook de la periodista Oxsana Shalyguina.

Al manifiesto se adjuntan fotos del artista con el cuchillo y una foto en la que los agentes de policía le quitan el cuchillo e intentan hacer bajar al artista del tejado.

“Recuperando el uso de la psiquiatría con fines políticos, el aparato policial recupera el poder para determinar la frontera entre la cordura y la demencia”, reza el manifiesto. El artista recibió primeros auxilios.

“Libertad”

Fuente: photoXpress

El pasado mes de febrero, en San Petersburgo Pavlenski construyó unas barricadas improvisadas con llantas de automóviles y les prendió fuego. Otros atributos de la acción fueron las banderas ucraniana y anarquista. La performance recordaba a los acontecimientos en el Maidán y a los enfrentamientos callejeros en Kiev.

En aquel momento, Pavlenski declaraba en su manifiesto: “Llantas ardiendo, banderas de Ucrania, banderas negras y el sonido de los golpes contra el metal, esta es una canción de liberación y revolución. El Maidán se extiende irremediablemente y penetra en el corazón del Imperio”.

Los bomberos sofocaron con bastante rapidez el fuego, el artista fue detenido pero, gracias a la intercesión de un abogado, fue liberado al poco tiempo. Más tarde se abrió una causa penal por vandalismo, se registró la casa del artista y de sus colaboradores y se confiscaron algunos objetos personales.

“Fijación”

Fuente: Reuters

En noviembre de 2013 Pavlenski, de nuevo desnudo, clavó su escroto en un adoquín de la Plaza Roja. Un video en el que aparece el artista sentado desnudo con varios espectadores alrededor, entre ellos algunos niños, se extendió por todo internet.

Al poco tiempo unos agentes de policía, tras cubrir al artista con una sábana y sacar el clavo del adoquín, lograron llevarse a Pavlenski de la Plaza Roja.

Esta acción se llevó a cabo el Día de la Policía y, según el propio artista, era una “metáfora de la apatía, de la indiferencia política y de la fatalidad de la sociedad rusa contemporánea”.

“Cadáver”

Fuente: photoXpress

Medio año antes de esta acción, Pavlenski se encerró en una especie de capullo hecho de alambre de púas. Esta era su protesta contra la prohibición de la propaganda homosexual,  la ley sobre el agravio de los sentimientos de los creyentes y otras leyes de gran resonancia pública. El artista calificó estas leyes de represión y censura. Sus comentarios sobre esta performance fueron los siguientes: “Un cuerpo humano desnudo, como un cadáver, sin nada sobre él, a su alrededor un alambre inventado para proteger este ganado doméstico. Estas leyes, como el alambre, mantienen a la gente dentro de leyes individuales…”

Unos agentes de la policía liberaron a Pavlenski del alambre con ayuda de unas tenazas y no se abrió ninguna causa penal por esta acción.

“Costura”

Fuente: Reuters

El primer escándalo que hizo famoso a Pavlenski sucedió en julio de 2012 en San Petersburgo. El artista se cosió la boca como señal de apoyo a las cantantes del grupo Pussy Riot, condenadas por su 'oración punk' en la Catedral de Cristo Salvador.

“Cosiéndome la boca con la Catedral de Kazán de fondo he querido mostrar la situación del artista contemporáneo en Rusia: no existe la libertad de expresión. Me disgusta el terror de la sociedad, la paranoia colectiva que observo en todas partes”, - declaraba el artista.

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