El agua ha entrado en más de 600 viviendas de
la localidad turística en el litoral del mar Negro y ha dejado más de
1.800 damnificados, según la Fiscalía general.
Más de 1.500
personas, entre turistas y residentes, han sido evacuados de
Novomijáilovski, donde quedaron inundados el hospital, la escuela y la
guardería, además de 22 edificios de viviendas, según las agencias.
Los servicios meteorológicos de la región de Krasnodar indicaron que
la localidad sufrió precipitaciones de 135 milímetros por metro
cuadrado, que causaron el desbordamiento del río que atraviesa el
pueblo.
La Fiscalía general anunció que investigará la
aplicación de los protocolos de seguridad y la labor de las autoridades
locales y regionales para advertir a la población.
En la
memoria de los rusos permanecen las trágicas inundaciones de las vecinas
provincias de Gelendzhik y Krimski, donde las autoridades locales no
avisaron a la población de las lluvias que se aproximaban a sus
ciudades, como constatarían más tarde los investigadores.
La
administración local de la provincia afectada señaló que el protocolo de
seguridad y la evacuación de los vecinos fue activada a las 01.20 horas
de la madrugada, lo que permitió que muchos pudieran salvar parte de
sus pertenencias.
El agua barrió más de 5.200 viviendas de las
ciudades de Krimski y Gelendzhik en la madrugada del pasado 7 de julio,
catástrofe en la que hubo más de 22.000 damnificados, la mayoría de los
cuales perdieron la mayor parte de sus pertenencias
Todos los derechos reservados por Rossíiskaia Gazeta.
Suscríbete
a nuestro boletín
Reciba en su buzón el boletín informativo con los mejores artículos sobre Rusia: