El gigantesco desafío de conseguir una hipoteca

En Moscú, se construyeron gran cantidadde casas caras, pero no vivienda social.

En Moscú, se construyeron gran cantidadde casas caras, pero no vivienda social.

Con la inyección de 8.300 millones de dólares en el mercado, el Kremlim busca reavivar el mercado hipotecario que fue muy golpeado por la recesión.
Victoria Sherbakova, una médica que trabaja en una clínica privada de liposucción en Moscú, vivía en los suburbios de Moscú, pero tuvo que mudarse. Su hija de tres años, Sasha, se estaba quedando ciega. “Los hospitales de Moscú son los mejores del país, pero hay que tener domicilio registrado en Moscú para acceder a su atención”, dice Sherbakova.

Su esposo también trabaja en la clínica, donde entre ambos ganan algo más de 5.000 dólares por mes, casi cuatro veces el promedio nacional.

Encontrar un departamento fue fácil. Reunir el dinero para pagarlo fue más complicado. En la actualidad, hay unas 128.000 hipotecas en Rusia, un país con 140 millones de personas.

Alrededor del 28% de las empresas rusas sigue operando en la economía “gris” y paga sólo una pequeña parte del sueldo en blanco para evitar impuestos y quienes quieren comprar un departamento, no pueden demostrar cuánto ganan.
Luego de buscar por una mes, Sherbakova descubrió Kreditmart, el único operador que revende hipotecas para las decenas de bancos comerciales. “La actividad hipotecaria cayó por un precipicio en 2009, pero la cantidad de préstamos aumentó mucho en los dos últimos meses”, dice el fundador de Kreditmart, James Cook.

Los bancos exigen un adelanto muy alto. “Ya habíamos ahorrado aproximadamente la mitad del pago en efectivo. Como trabajamos en el sector médico, podemos ganar más dinero, de modo que reunir el resto no fue un problema”, dice Sherbakova.
Pero Sherbakova sí encontró un gran obstáculo: el dueño del departamento estaba dispuesto a vender, pero quería que en la escritura sólo figuraran dos millones de rublos. El Estado ofrece una exención impositiva sobre los primeros dos millones de rublos, pero grava el resto. Cook dice que es un problema muy común, y que muchos vendedores insisten en declarar sólo una parte de la venta. Los Sherbakov tenían que pedir un crédito, por lo que necesitaban que en la escritura figurara la suma total. La negociación llevó varias semanas, pero la familia se mudó en junio.

“El edificio se construyó en 1970 y aunque es mucho más chico, tenemos portero y un jardín de infantes al lado, lo cual es perfecto para Sasha”, señala Sherbakova.

La actividad hipotecaria alcanzó un volumen de 685.000 millones de rublos (17.300 millones de euros) en 2008. Al año siguiente se contrajo de forma abrupta. Según Cook, en los dos últimos meses se ha vuelto a recuperar.

Sin embargo, se calcula que este año la cantidad de dinero prestada rondará los los 220.000 millones de rublos (unos 5.600 millones de euros), una cifra mucho menor que la de antes de la crisis.


Un mercado en recuperación

Los rusos parecen las personas más ricas de Europa gracias a la decisión del gobierno, luego de la caída de la URSS, de otorgar la propiedad de los apartamentos a sus ocupantes. El problema es que si bien estas propiedades están valuadas en miles de millones, al carecer de un mercado hipotecario activo su riqueza, se encuentra inmovilizada en ladrillos.

El mercado hipotecario ruso nació cerca del año 2003. Sin embargo, las condiciones de los préstamos son caras. Los bancos pueden solicitar hasta un 40% del precio de un departamento como depósito, aunque en los últimos meses la mayoría está ofreciendo hipotecas por el 80-90%, a medida que el mercado se reaviva. Con vencimientos a 25 años, las tasas son altas, pero también están cayendo de la mano de la recuperación de la economía: las tasas de interés aumentaron a un 18-20% el año pasado y se encuentran en un 11-14% en la actualidad para préstamos en rublos.

El mercado se recupera con rapidez en parte porque el Kremlin inyectó unos 8.300 millones de dólares para brindar apoyo a los préstamos.

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